Las 10 conclusiones que deja Roma 2019

Analizamos las sensaciones que deja el último gran torneo preparatorio de cara a Roland Garros y cómo pueden influir en el Grand Slam.

Diego Jiménez Rubio | 20 May 2019 | 07.51
facebook twitter whatsapp Comentarios
En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.
En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.

Se acabaron las especulaciones, los condicionales, las esperanzas y las suspicacias. La gira europea sobre tierra batida preparatoria para Roland Garros 2019 ha tocado a su fin para la inmensa mayoría de los grandes jugadores del planeta y máximos candidatos al título en París. Esta semana entrante se erige en esos momentos de tensión previos a una gran batalla que puede guiar la historia de este deporte. La tormenta de emociones que se han vivido en Roma 2019 incitan a una profunda reflexión y hacen necesario tomar aire y prepararse bien para lo que se avecina.

Hay cosas que pueden intuirse después de lo acaecido en la ciudad eterna, donde se ha producido un punto de inflexión en muchas vertientes del deporte rey de la raqueta. Rafael Nadal y Karolina Pliskova tendrán el lujo de acariciar un trofeo antes de fijar la vista en el segundo Grand Slam del año y, sobre todo, podrán llegar repletos de confianza y despejando viejos fantasmas. Pero han pasado muchas cosas durante esta semana en el Foro Itálico. Estas son las conclusiones que deja el torneo.

1. Rafael Nadal está preparado para el asalto a la duodécima.

El proceso se ha completado y tan solo queda demostrarlo. El español ha borrado de un plumazo todas las dudas que pudieran haber surgido en las semans precedentes y que desde todas instancias hemos magnificado ante lo exótico que supone ver perder partidos a este monstruo sobre su superficie predilecta. Su versión en Barcelona fue mejor que la de Montecarlo, la de Madrid sensiblemente superior a la Barcelona y en Roma se ha demostrado a sí mismo que está listo para una nueva batalla en París. Su favoritismo gana enteros tras lo hecho en el Foro Itálico y parece confirmar una teoría que genera escalofríos: para ganar a Nadal en arcillo no basta con hacer un partido perfecto, hay que esperar que el suyo no lo sea.

Embed from Getty Images

2. Novak Djokovic consolida el retorno de su modo chacal.

Algo cambió en la mente del serbio cuando jugó contra Thiem en Madrid, pero en Roma se ha dado una vuelta de tuerca. A pesar de irse sin el título, las credenciales de máximo candidato a la gloria en París junto a Nadal (algunos preferirán poner "detrás de") los constantes ejercicios de supervivencia que ha hecho el balcánico meten miedo a sus rivales. No se le ha visto cómodo durante toda la semana, pero logró sacar adelante un partido ante Del Potro en el que se sintió inferior (y lo fue) en muchos tramos, otro contra Schwartzman superando su cansancio y, sobre todo, vender muy cara su piel ante el balear cuando era evidente que le faltaba energía. Poder mental, carácter ganador y ese aura de las leyendas que cuando le envuelve, hace que sea capaz de todo.

3. Nubles y claros entre los más firmes candidatos a destronar al español y el serbio en París.

Cuando pensamos en quién podría sorprender a alguno de los dos gigantes en París, se vienen a la cabeza pocos nombres. Roger Federer ha reafirmado sus ansias por competir y su capacidad sobrada para hacerlo bien, aunque todavía parece algo lejana la posibilidad real de verle ganando a cinco mangas contra Rafa o Novak. Juan Martín Del Potro ha recuperado su mejor nivel y puede ser una auténtica revolución en París. Dominic Thiem ofrece síntomas de irregularidad mientras que Fabio Fognini parece algo mermado físicamente, condición incompatible con verle desplegando el juego del que hizo gala en Montecarlo. Lo de Alexander Zverev es un nubarrón que vaticina inundaciones si algo no cambia rápidamente, y se antoja difícil encontrar más nombres como firmes alternativas al poder establecido.

Embed from Getty Images

4. Diego Schwartzman y Fernando Verdasco, potenciales matagigantes.

En un día inspirado, pueden hacer un destrozo a cualquiera. Lo saben ellos, lo sabemos nosotros y lo saben los favoritos, y esa sabiduría se ha reafirmado esta semana. El argentino ha encontrado el nivel que tantas semanas le llevaba siendo esquivo y no es descabellado verle en una segunda semana en París que afronte sin nada que perder y mucho que ganar. Por su parte, el español transmite sensaciones positivas una semana más y tras asegurarse ser cabeza de serie en París, es capaz de lo mejor y lo peor, creciéndose en los grandes escenarios y ante rivales de enjundia.

5. Nick Kyrgios ha ido demasiado lejos.

Tristeza es la única sensación que perdura días después del grotesco espectáculo dado por el australiano. Detrás de esa pose de bad boy parece esconderse un chico perdido en su vida, asfixiado por sus miedos al fracaso y empeñado en ponerse la peor de las corazas para no afrontar la realidad, haciendo daños colaterales a un deporte que no merece esos agravios y a unos rivales que no tienen por qué soportar su show. Merece ser castigado y necesita ayuda urgente y profesional, no ya por su carrera tenística, sino de cara a su felicidad y vida personal.

6. Karolina Pliskova deja atrás su fobia a la tierra batida.

¿Quién dijo que las gigantes pegadoras checas no podían jugar bien en arcilla? Pliskova sale de su zona de confort con la ayuda de Conchita Martínez y alcanza un resultado que puede cambiar cosas en su trayectoria. Le falta subir un peldaño para ganar algo verdaderamente importante y no se le puede descartar en París. Se mueve cada vez mejor, ha entendido la necesidad de adaptar su juego y tiene armas más que suficientes para hacerlo con eficacia.

Embed from Getty Images

7. Resurgimientos ilusionantes de Johanna Konta y Kristina Mladenovic.

Dos talentos puros que estaba diluidos se han erigido en ave fénix esta semana. Se intuía desde hace un tiempo que tanto la británica como la francesa estaban en el buen camino, pero esta eclosión en Roma vaticina emociones fuertes en el tenis femenino. Su potencial es infinito y pueden generar una auténtica revolución en París si son capaces de dar continuidad a su nivel de juego.

8. Molestias físicas inquietantes en algunas favoritas.

La preocupación subyace en todo jugador cuando a apenas una semana del inicio de un Grand Slam se ve abocado a retirarse. Naomi Osaka, Serena Williams, Garbiñe Muguruza y Petra Kvitova tendrán que andar con mucho tiento si no quieren ver comprometida su participación al 100% de sus posibilidades en Roland Garros. Japonesa y checa partirán con la vitola de favoritas, mientras que Garbiñe sigue necesitada de un gran resultado que cambie algo en su compleja mente. El estado de forma de la estadounidense es una completa incógnita.

Embed from Getty Images

9. Marketa Vondrousova y Maria Sakkari, jugadoras de presente y futuro.

Son talentosas, polivalentes, jóvenes, potentes y carismáticas. Checa y griega han sido tremendos alicientes durante la semana y se consolidan como tenistas capaces de hacer grandes resultados ya en la actualidad. Parecen listas para abordar grandes citas y hacen gala de una madurez e inteligencia emocional en pista que invitan a pensar que sus grandes actuaciones no son meras escaramuzas, sino inicios de carreras importantes.

10. Victoria Azarenka prosigue con su tendencia al alza.

Pasos pequeños pero seguros. Así es como avanza la bielorrusa en su afán por retornar a la élite. Está siendo capaz de ganar partidos con continuidad mientras que se erige en una de las mejores doblistas del mundo. Dicha modalidad le da el ritmo y la confianza necesarias para continuar viéndose capaz de ser candidata a todo allá donde vaya. Gran actitud, hambre competitiva y juego cada vez más sólido de una mujer que merece otra oportunidad.

Embed from Getty Images

No todo ha sido perfecto en el gran escenario que supone la capital italiana. Se ha hecho patente la necesidad de que el torneo aborde de una vez por todas una reforma en sus instalaciones con el fin de reducir el impacto de la lluvia. Un día entero de precipitaciones ofreció una jornada histórica a los aficionados, pero desvirtuó el evento provocando molestias físicas en jugadores y condicionado el desarrollo del evento en la jornada del viernes. Además, las quejas de los jugadores sobre el estado de la tierra batida han sido constantes, con botes irregulares, líneas muy mojadas y zonas de la pista excesivamente resbaladizas. La belleza y la historia deben combinarse con modernidad y apuesta por la innovación para continuar en la élite. Por si esto fuera poco, la dilatación en el tiempo de la jornada nocturna, con partidos que han terminado más allá de la medianoche, ha vuelto a ser un quebradero de cabeza para tenistas y aficionados, que la organización debería replantearse para futuras ediciones si no quiere ver el espectáculo del siguiente día condicionado por el cansancio de alguno de los contendientes.

El ATP Masters 1000 Roma 2019 y WTA Premier 5 Roma 2019 tocaron a su fin dejando imágenes imborrables en la memoria colectiva de este deporte. El circuito masculino se encamina ahora a Lyon y Ginebra, mientras que el femenino lo hace a Nuremberg y Estrasburgo, aunque todas las miradas convergen en un punto: Roland Garros 2019. El segundo Grand Slam de la temporada puede ser determinante en el devenir de la historia de este deporte y, como tal, lo afrontarán todos los tenistas participantes en el mismo. ¡Que continúe el espectáculo!