Trungelliti: "Si no aceptamos que el tenis está lleno de corrupción, nunca lo solucionaremos"
El argentino fue muy duro valorando de nuevo cómo el mundo de las apuestas y la extorsión están arruinando este deporte. Reclamó más apoyo.


Directo, elocuente y duro. Así se volvió a mostrar Marco Trungelliti cuando fue cuestionado sobre las catacumbas del tenis profesional, esa nebulosa que todo el mundo parece tener claro que existe pero que muy pocos se atreven a abordar de manera contundente. El argentino fue uno de ellos y, en primera instancia, recibió numerosas amenazas por parte de entrenadores e incluso compañeros, que le consideraron un chivato y vieron cómo su estatus quedaba amenazado por alguien que se atrevió a agitar el árbol. Ayer, tras tener que retirarse en primera ronda del US Open 2019 por lesión ante Kei Nishikori, el tenista argentino se reafirmó en su decisión de colaborar con la Unidad Integral del Tenis (TIU) y denunció la presencia en Nueva York de entrenadores e incluso jugadores que podrían estar vinculados en el amaño de partidos.
"Si no se dicen las cosas y asumimos que esto es un nido de corrupción, nunca podremos solucionarlas. En este mismo torneo, dándome una vuelta, veo gente pululando que todos sabemos que están involucrados en los amaños de partidos. Un montón de entrenadores a los que habría que sancionar y se les trata como si no pasara nada. Igual con los jugadores, esto no puede seguir así", aseveraba el actual 205 del ranking ATP, que no se arrepiente de su decisión de destapar los escándalos que él mismo conocía, después de que personas dedicadas a estas cosas se pusieran en contacto con él para incitar a que participara. "Prefiría estar muerto 20 veces antes que formar parte de alguna manera de ese mundo. No puedo hacer como muchos otros, que se quedan calladitos y siguen adelante, eso es un desastre", dijo en palabras recogidas por el diario LaNacion.
Respecto a la falta de apoyos que sintió en los compases iniciales a su decisión y cómo eso fue cambiando a medida que sus hechos se internacionalizaron, Trungelliti habló largo y tendido ofreciendo interesantes datos que se suman a lo que ya dijo hace unos meses, cuando reconocía haber sufrido problemas de ansiedad y estrés al verse amenazado y perseguido. "Fue un proceso. Al principio todo fue mal, me encontré con rechazo incluso de compañeros. Por fortuna, salió Leonardo Mayer a decir las cosas como son y apoyarme. La TIU no intervino para secundarme hasta que hubo gente en el Consejo de Jugadores que se pronunció a mi favor y después todo fue ganando peso. El NYTimes, L´Equipe y McEnroe ayudaron mucho a que mi lucha se conociera", señaló un hombre profundamente decepcionado con la actitud que ha percibido.
"El tenis siempre ha sido un deporte individualista, pero en estas situaciones es una individualismo asqueroso. A todos les importa un carajo lo que pueda ocurrirle a un compañero". Palabras muy interesantes que a buen seguro generarán un importante seísmo en el mundo del tenis. Marco Trungelliti sigue denunciando situaciones que serían absolutamente inaceptables de confirmarse y el mundo del tenis debe abordar este asunto sin paños calientes. Habrá que ver si el argentino está más respaldado en los próximos meses y puede seguir desvelando detalles del lado más oscuro de este magnífico deporte.