Masarova: “Es mi primer Grand Slam, no tengo nada que perder”
Después de superar la fase previa y colase en segunda ronda, ahora la española tendrá cita con Svitolina. “Me gustan estos partidos, solo puedes aprender de ellos”.


Antes de empezar este US Open 2021 ya teníamos claro que una de las grandes historias del torneo era la de Rebeka Masarova. Jugadora española, nacida en Basilea hace 22 años e inmersa en su primer Grand Slam como profesional. Su camino arrancó en la fase previa, la primera que jugaba en su carrera, aunque viéndola competir no lo pareciese. Sus tres victorias le dieron el pase a su primer cuadro final, donde se vació durante 3h43min ante Ana Bogdan, salvando dos match points e inaugurando su casillero de triunfos oficiales esta temporada. Después de la maratón, Punto de Break tuvo el placer de charlar con ella.
“Diría que es la victoria más grande que he tenido, sobre todo teniendo en cuenta el nivel del torneo”, declaró Rebeka después de tiebreaks de infarto. “Era mi debut en un Grand Slam y… ¡vaya partido! El más duro que recuerdo, solamente por el marcador. Mi rival ha jugado muy bien, no me lo ha puesto nada fácil, ha llegado un punto donde podía haber ganado cualquiera. Cuando ella tuvo match point se ha jugado un revés paralelo que se le ha ido por dos centímetros, ha sido todo ajustadísimo”, valoró la española.
El marcador, que llegó a estar 7-6 y 3-0 en su contra, terminó dando un vuelco inesperado a su favor, aunque en la tercera manga tampoco faltó el drama. De nuevo un desempate, el tercero, donde Masarova tuvo que salvar dos bolas de partido en busca del triunfo deseado. “En el primer set notaba todo el rato que tenía muchas oportunidades, incluso tuve alguna bola de break que no pude convertir, pero eso me dio bastante confianza. Perdí 7-6, fue muy frustrante, pero había tenido muchas opciones, si me mantenía en el partido y seguía pelando podían volver esas oportunidades. Solo tenía que creer y es lo que hice, aunque hay momentos en los que una se vuelve loca”.
Torneo de presentación
Su historia con los Grand Slams fue idílica desde su etapa junior, cuando levanto Roland Garros en 2016 y quedó finalista en el Open de Australia 2017. Años más tarde, siendo ya una mujer, Rebeka quiere confirmar que sigue teniendo la misma estrella en su raqueta. “Jugar mi primer Grand Slam, pasar la Qualy y ganar la primera ronda… son demasiadas emociones. Cada partido es como.. ‘Guau, ¡he ganado otro!’. Por una parte me lo creo, cada partido que juego salgo con la intención de hacer todo lo posible para ganar, pero por otra parte también pienso que todo lo que venga ahora es como un plus. No quería venir a mi primer Grand Slam y, por ser el primero, conformarme con hacer segunda ronda de Qualy, aunque hubiera estado bien también”, admite la jugadora de la BTT Tennis Academy, en Barcelona. “Trabajar con Pipo Maresma y con mi psicóloga (Lorena) me está ayudando a mantener la calma, a confiar en las cosas buenas que tengo. He tenido muchos partidos que pude darles la vuelta, así que en situaciones así me agarro a esos momentos. Al no haber jugado nunca un Grand Slam, vengo aquí sin expectativas, no tengo nada que perder”, sostiene con ilusión.
Su vuelta a España en el mes de febrero fue el inicio de un regreso a los orígenes, un reseteo deportivo y mental en busca de la excelencia que siempre tuvo como meta, aunque para ello hubiera que empezar desde lo más bajo de la pirámide. “Empezamos desde la base, jugando las fases previas en torneos de 15.000$. Era un cambio de entrenador, de lugar y del sistema. Yo venía de una lesión y necesitaba empezar de cero, pero es cierto que desde el título en Platja d’Aro (mayo) ha ido todo rapidísimo”, celebra con un balance actual de 40-8 esta temporada.
“La última vez que hablamos me preguntaste acerca de los objetivos y no quise hablar mucho sobre el ranking, muchas veces te propones algo y luego, si no lo cumples, te decepcionas. Pues a veces pasa al revés, que las cosas van mucho mejor de lo que pensabas, ese es el escenario que tengo ahora”, resume una Masarova que arrancó el año siendo 731º del ranking y que hoy ya tiene asegurado el top200. “Está siendo todo un poco loco, tengo momentos de no creérmelo, de pensar que todo está yendo muy rápido. Sinceramente, jamás pensé que podría estar jugando el US Open este año, pero entrenando día a día, yendo partido a partido y sin pensar mucho en el futuro es lo que más me ha ayudado”.
Un partido para soñar
El horizonte la cruza ahora en segunda ronda con Elina Svitolina, uno de los rostros fuertes del vestuario WTA que además llega tras ganar un título en Chicago. ¿Presión? ¿Motivación? Un poco de ambas. “Me gusta jugar partidos grandes, como éste. Son partidos en los que, pase lo que pase, solo puedes aprender y sumar una experiencia para el futuro. Obviamente, es una jugadora de las mejores contra las que me habré enfrentado, además de tener mucha más experiencia que yo. Pero no tengo nada que perder, vengo de ganar cuatro partidos y no me doy por satisfecha. La analizaré como a a cualquier otra rival y lucharé hasta el último punto con todos mis recursos. Hay que aprovechar el momento, tengo muchas ganas de hacer un buen partido”, concluye la española, con ganas de seguir volando en Nueva York.