
Daniil Medvedev ha activado ese modo robot tan temido en sus rivales. El tenista ruso, que volvió al top 10 después de ganar en Rotterdam la semana pasada, llegó al ATP 250 de Doha con el objetivo de mantener el nivel mostrado en Países Bajos y por el momento lo está consiguiendo. Ahora mismo no hay quien meta mano a Medvedev, que está desquiciando a cada uno de sus oponentes con ese juego defensivo tan característico suyo donde parece una pared humana imposible de atravesar.
Fue ese juego el que le llevó a derrotar a Felix Auger Aliassime por 6-4 y 7-6(7) en un choque donde el canadiense buscó hacer algo diferente a la semana pasada -cuando perdió 6-2 y 6-4- pero no consiguió cambiar el rumbo del encuentro a pesar de competir mucho mejor que en su anterior enfrentamiento. Con esta derrota Aliassime vuelve a caer de nuevo ante Medvedev, que le ha ganado con esta las seis veces que se han enfrentado, lo que deja claro que Aliassime no encuentra la táctica con la que desarmar al ruso.
El partido empezó de manera prácticamente idéntica a como lo hizo la semana pasada en Rotterdam, con Felix intentando acortar los puntos y Medvedev bajándole ritmo a la pelota para buscar sus fallos, algo que no le costó mucho de inicio por todo lo que estaba colaborando el canadiense a la causa. De hecho, el exnúmero uno sin hacer grandes cosas se puso break arriba y tuvo varias opciones de conseguir la doble rotura, pero un par de errores inesperados le privaron de conseguirlo y le pasó factura, pues de repente Aliassime se reenganchó al partido e igualó a cuatro el marcador.
Poco o nada tardó Medvedev en volver a bajar el ritmo de pelota, lo que trajo de nuevo los errores de Aliassime y con esto un nuevo break para ahora sí, sacar y cerrar la primera manga. Le costó más de la cuenta al moscovita, que tuvo que levantar dos opciones de rotura para anotarse este primer capítulo de un encuentro que estaba dominando de forma clara, pero sin conseguir traducir esa superioridad en un marcador más abultado.
EL BUEN HACER DE ALIASSIME
El segundo set empezó igual que el primero, con el ruso rompiendo a las primeras de cambio y teniendo de nuevo opciones para un segundo break que habría significado el punto y final al partido. En cambio, con un guion idéntico al de la primera manga, Aliassime se mantuvo en el encuentro y recuperó el set mostrando además su mejor nivel en el encuentro, golpeando durísimo de derecha y variando mucho su servicio para intentar sorprender a un Medvedev que no se inmutaba a pesar del giro que había dado el encuentro.
Ahora el canadiense lograba sacar bien sus turnos de saque y el set iba encaminado a un tiebreak que tuvo mucha emoción además de opciones para ambos. Fue Felix el que mandaba, al contrario de lo que estaba sucediendo en el resto del partido, y Medvedev el que se negaba a que el choque se fuera a un set decisivo. El canadiense sentía muy bien la pelota y repartia grandes golpes a todos los lados de la pista hasta conseguir disponer de hasta tres pelotas de set, una de ellas con su servicio. La primera bola la salvó el ruso con un saque directo, mientras que la segunda -al saque de Aliassime- la levantó con el modo pared, que terminó por deseperar al actual número 9 del mundo que veía como una de sus derechas se iba al pasillo de dobles.
La última también la levantó Medvedev con un buen servicio, para a continuación conectar otro más que le ponía con la primera pelota de partido, que nuevamente acertó a convertirla al aprovechar un error de su oponente. Esta victoria significa el octavo triunfo consecutivo del ruso, que está en racha en estos momentos y parece que va a ser uno de los nombre a tener en cuenta para los Masters 1000 de Indian Wells y Miami, donde una buena participación le acercaría de nuevo a los primeros puestos del ranking.