Toni Nadal en Wimbledon 2005. "Rafa, tenemos un problema con un chico serbio"

El tío de Rafa desvela el impacto que le supuso ver a Novak por primera vez, en Wimbledon 2005, donde se enfrentó a otro tenista español.

Diego Jiménez Rubio | 9 Jul 2020 | 15.05
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Toni Nadal, primera vez que vio a Novak Djokovic. Foto: gettyimages
Toni Nadal, primera vez que vio a Novak Djokovic. Foto: gettyimages

Hay momentos en la vida que se quedan grabados a fuego en la mente y uno de ellos lo experimentó Toni Nadal en Wimbledon 2005. El tío de Rafael Nadal, que aterrizó en el torneo londinense apenas un mes después de sumar su primer título de Grand Slam en Roland Garros, estaba paseándose por las instalaciones del All England Lawn Tennis Club el primer día de competición, cuando se percató de que en la pista 18 estaba compitiendo el amigo íntimo de su sobrino, Juan Mónaco, contra un joven serbio de 18 años.

"No sabía quién era, nunca le vi jugar y pregunté por él. Me dijeron que tenía 18 años, era serbio y rondaba ya el top-100", recuerda Toni. Es preciso recordar que Djokovic era 128 del mundo en aquellos momentos y apenas se había dado a conocer en el circuito ATP. "Vi cinco minutos el partido y me fui directo al vestuario a hablar con mi sobrino. En cuanto llegué le dije ´Rafa, tenemos un problema. Acabo de ver a un chico muy muy bueno`", declara Toni en palabras recogidas por la web de la ATP.

Aquel partido terminaría cayendo del lado de Novak, que en la siguiente se mediría a Guillermo García-López, en lo que fue uno de los momentos más inolvidables a lo largo de toda su trayectoria en Wimbledon. Y es que en el marcador campeaba un 6-3 6-3 5-3 40-30 a favor del jugador español, pero todo cambió en unos instantes. "Fue increíble, tenía el partido ganado. Con punto de partido pegué un saque a la T, me quedó una derecha cómoda y ajusté a la línea. Celebraba la victoria cuando el árbitro corrigió y dijo que era mala. Luego tuve 6-5 y 40-0 con mi saque. Aún no sé cómo se me escapó", recuerda el de La Roda.

"Nunca se rindió, se veía que tenía muchísimo potencial, era muy sólido tanto de derecha como de revés. Que siendo tan joven me remontara ese partido, puso de manifiesto que era un competidor nato. Tenía una agilidad impresionante y estaba claro que confiaba muchísimo en sí mismo", rememora un Guillermo García-López que acabaría perdiendo por 3-6 3-6 7-6 85) 7-6 (4) 6-4, aunque Novak Djokovic sería eliminado en tercera ronda por Grosjean. Lo que es evidente es que el balcánico poseía ese aura de gran jugador que solo unos pocos elegidos poseen, y Toni Nadal supo verla y anticipar los problemas que venían para su sobrino, con una rivalidad memorable.