El primer tenista de élite que decidió tener una entrenadora, Andy Murray, anunciaba ayer que su relación con Amelie Mauresmo llegaba a su fin después de casi dos años en los que el británico ha vuelto a los puestos altos del ranking y a luchar por los Grand Slams. La nueva vida de Mauresmo, con su hijo recién nacido, y el poco tiempo que le podía dedicar a su trabajo junto a Murray parece haber sido la principal causa tal y como explica Daily Mail. "De los últimos dos meses y medio sólo nos hemos visto 10 días. Esto hace las cosas muy complicadas", cuenta Andy al medio inglés. Las 25 semanas que ambos tenían acordadas no se estaban cumpliendo y es que para la francesa, viajar por el circuito tras haber dado a luz hace unos meses estaba siendo bastante complicado por lo que parece que esta decisión ha sido la mejor para los dos. El británico ya busca un nuevo entrenador.
Las razones por las que Murray y Mauresmo han dejado de trabajar juntos