Djokovic mejora sus prestaciones y pasa el rodillo

No tuvo Novak Djokovic su mejor estreno en el ATP 500 de Dubái, donde sufrió de lo lindo para deshacerse de Tomas Machac. Por ese motivo todos los ojos miraban este miércoles al serbio con dudas sobre cómo sería su puesta en escena en su duelo ante Tallon Grikspoor, otro jugador ofensivo y de buen servicio que además venía en una dinámica positiva.

En cambio, Nole no tardó ni dos juegos en disipar todas las dudas que dejó el martes en su debut. Djokovic se mostró mucho más entonado desde el principio, dando un recital con su servicio y convirtiendo en una auténtica pesadilla cada turno de saque de su rival, que se quedó en apenas cinco juegos tras caer por 6-2 y 6-3 sin prácticamente oponer resistencia ante el serbio, que esta vez sí, le salió todo lo que propuso.

En la primera manga el clima fue más enemigo para Djokovic que el propio Griekspoor. El partido se paró por unos minutos con 2-0 en el marcador por la humedad y unas pocas gotas que cayeron sobre la pista. No obstante, eso no frenó a Nole, que ya venía de haber hecho un buen juego de saque y una espectacular rotura de servicio con dos magníficos passings que negaban al neerlandés utilizar la táctica que empleó en primera ronda Machac.

La reanudación del partido trajo más de lo mismo, con Djokovic tirando la pelota de línea a línea y firmando todos los ganadores que no consiguió en su primer encuentro. Definitivamente se encontraba muy cómodo y más aún teniendo en cuenta que la situación más compleja a la que se tuvo que enfrentar durante el set fue un 15-30 que tras salvarlo aprovechó para golpear de nuevo y conseguir un nuevo break con el que cerrar esta primera manga.

VENDAVAL DJOKOVIC

Era evidente que a Griekspoor no le estaba saliendo nada y ya se sabe que cuando alguien como el serbio huele la sangre ataca y lógicamente eso fue lo que hizo. Sin apenas dar tiempo a su rival de asimilar el primer set, Nole se puso 3-0 en el marcador para dejar encarrilado el encuentro. A Djokovic le salía todo lo que buscaba mientras que su rival acumulaba fallos y más fallos, algunos de ellos incomprensibles, sobre todo en las voleas y también con su derecha, con la que caía en precipitaciones tras desesperarse viendo que su oponente era un muro de fondo.

No contento con eso, Nole se fue a por más con el objetivo de cerrar el partido cuanto antes. Fue entonces cuando se vivió el juego más largo del choque, con hasta 14 deuces y opciones para ambos y donde al final, a pesar de las numerosas ventajas que tuvo Griekspoor, el juego cayó de lado de Djokovic, como sucedía una y otra vez en el encuentro. Este break fue ya la puntilla de un set en el que el serbio estuvo tocado por una varita, con restos directos imposibles, magníficos servicios y hasta alguna que otra dejada perfecta. Sin embargo, el duelo todavía nos iba a dejar una pequeña sopresa y después de que Nole tuviese pelotas de partido para ganar 6-0, firmó un juego desastroso (con dos dobles faltas), que abría un poco el set hasta llegar al 6-3 final.

Esta victoria tan contundente disipa todas las dudas que dejó Novak Djokovic en su primer partido. Nole ha dejado una exhibición de tenis que le coloca como el gran favorito para hacerse con el título y seguir invicto esta temporada. Ahora, con el billete a los cuartos de final en su bolsillo, espera rival del partido entre Hubert Hurkacz y Pavel Kotov.