
Ons Jabeur es la clara protagonista de estos últimos días en el circuito WTA, después de su título en Madrid. La tunecina sin tiempo para celebrar, llega a Roma para seguir prolongando su buen estado de forma y asegura que quiere más: “Lo de Madrid fue increíble pero ahora estoy aquí y tengo que centrarme en este maravilloso torneo”.
Sobre si ha asimilado el título de Madrid
“Bueno, no mucho. La verdad es que ha sido una semana increíble para mí. Ayer tuvimos una pequeña celebración con Karim. Pero tampoco gastamos mucho tiempo ya que teníamos que venir aquí, así que la celebración ha sido algo tranquila. No quiero agobiarme con el trofeo y quiero poner todos mis pensamientos en Roma”.
Felicitaciones por el título
“He recibido miles de felicitaciones desde ayer hasta hoy. Me encanta ver como todos los jugadores se alegran por mi victoria. He recibido muchísimos abrazos y eso es algo que me encanta (risas)”.
“Espero seguir a este gran nivel. El circuito WTA es muy competitivo y exigente y tengo que seguir al máximo para que los resultados continúen siendo positivos. Estoy orgullosa de lo que estoy consiguiendo y ojalá sigan viniendo buenos momentos en el futuro”.
Sobre su estilo de juego
“Tengo un tipo de juego muy característico y lo aprendí desde muy joven. Esto fue gracias a mi entrenador, que siempre me dejó jugar como yo quisiera. Mi estilo refleja la personalidad que tengo en pista, soy una jugadora bastante sorprendente y no me gusta nada la rutina.
Sobre Roland Garros
“Es evidente que en mi cabeza está Roland Garros y que todos estos torneos son una preparación para el Grand Slam. Me gustaría saber gestionar las victorias como lo suelen hacer los grandes jugadores. Es un reto para mí saber cómo manejar las emociones. Tengo que estar preparada tanto física como psicológicamente”.
Dificultades en su carrera
“Me ha costado creerme que podía ganar títulos y estar entre las mejores. Tengo que aprender a que no me importa lo que dice la gente y centrarme en mí. He tenido malas experiencias que me han servido para aprender en el futuro”.
“Cuando me lesioné la muñeca y me operaron dije que tenía el objetivo de ganar Roland Garros. Después de eso, escuché a una infinidad de periodistas y aficionados riéndose por lo que dije. Fue muy duro que la gente no confiase en mí”.
“Después de escuchar todas esas críticas, aprendí a no hacer caso a toda esa gente y a centrarme en mí misma. Cuando tienes total confianza en ti misma, lo de afuera pasa a un segundo plano y eso es lo que he aprendido con el tiempo”.