Conquistar un Masters 1000 es extremadamente complicado. Hacerlo dos veces, verdaderamente díficil. Que esas dos veces sean en semanas consecutivas resulta prácticamente una tarea titánica, un esfuerzo hercúleo. Que se lo digan a Jannik Sinner, que llegaba al ATP Cincinnati 2023 lleno de confianza tras una gran actuación en Toronto, donde inauguró su palmarés de este tipo de torneos. Sin embargo, su racha se vio cortada a las primeras de cambio por un sensacional Dusan Lajovic, que vuelve a recordarnos en Cincinnati a aquel tipo que venció a Djokovic hace unos meses. Victoria sin paliativos que rebajará la euforia en el equipo de Jannik (6-4, 7-6(4)) y que no podrá partir como top-4 en el próximo US Open. Tampoco lo hará Casper Ruud, que sumó una dura derrota ante el australiano Max Purcell (6-4, 3-6, 6-4) en un duelo en el que dilapidó numerosas bolas de rotura (1 de 7, por el 1 de 3 del oceánico). Día de sorpresas en Cincinnati.
Sinner y Ruud se estrellan y dinamitan sus opciones de top-4 en Cincinnati