La tenista suiza, que está jugando el torneo marroquí de Rabat, no dejó en su partido de primera ronda contra Johanna Larsson un punto de lo más curioso, ya que al resbalarse en la pista tuvo que ingeniárselas para meter la bola en pista desde el suelo. La bola cayó en la línea y una sorprendida Larsson mandó su revés fuera y concedió la rotura en el tercer juego del partido.
Bacsinszky la mete sentada