La poca honestidad de Raonic en Montreal
El tenista canadiense, cuya actitud enfadó a Del Potro, mantuvo un talante cuestionable en una acción polémica


Milos Raonic protagonizó el episodio poco decoroso de la jornada en el Masters 1000 de Montreal. En el partido de tercera ronda que le enfrentaba al argentino Juan Martín del Potro el canadiense tocó la cinta en un punto capital del partido. El juez de silla no vio la acción. Milos no reconoció deportivamente el hecho. Y Juan Martín entró en cólera.
Era un momento crítico del encuentro. Juan Martín había cedido el primer parcial y comandaba el segundo set 4-3. Con 40-40 se exponía a un punto vital para terminar de dar forma a la ventaja adquirida. En ese momento llegó la acción que cambió el rumbo del encuentro.
Un segundo servicio de Juan Martín precede a un intercambio de fondo. Raonic tomará la iniciativa con sus derechas y comenzará a ganar terreno. Una bola corta de Del Potro es aprovechada por Milos para reventar un forehand en mitad de pista. Lleva tanta inercia al caminar hacia la pelota que no le da tiempo a frenar y se precipita sobre la cinta.
Raonic toca la red con la puntera de la zapatilla izquierda. El contacto con la cinta no está permitido y el punto debería haber sido concedido a Del Potro. Raonic es plenamente consciente de su acción. Las repeticiones muestran cómo el canadiense, sabedor de la regla, trata de evitar el contacto entre el calzado y la cinta, y observa cómo no lo consigue -la red se zarandea de forma clara-. Baste observar el rostro con el que busca las reacciones de los líneas, comprobando que nadie se ha percatado e inmediatamente después bajando la cabeza.
Lahyani, juez de silla del partido, no ve la acción. Se encuentra observando la pelota en el momento en que Raonic toca la red. Cuando Del Potro le recrimina la decisión, responde que ha decidido en base a lo siguiente: "The ball was dead for me (la bola estaba muerta para mí)". Traducido: una bola 'muerta' significa que la esfera ha botado dos veces. Pero en la repetición podemos observar claramente cómo Raonic toca la red después del primer bote, nunca antes del segundo.
Del Potro no acepta lo ocurrido. Lahyani le dice que ya ha tomado la decisión. Reconoce que no ha visto la acción porque estaba observando la pelota y no el movimiento de Raonic. Entonces, Juan Martín le dice que ponga la acción en los videomarcadores para salir de dudas. El silla le dice que no puede hacer eso. Es un error y no lo podemos mostrar. "Es tú error" le indica Del Potro, y Lahyani se lo reconoce. "O sea, tú cometes un error y yo pierdo el punto" replica Juan Martín iracundo.
Según la normativa no se pueden emplear repeticiones de vídeo a modo de challenge. En ese sentido, Layhani no podía cambiar su decisión tomada en virtud del camino propuesto por Del Potro. Podía hacerlo si el jugador implicado, en este caso Raonic, hubiera intervenido para reconocer lo ocurrido.
Milos, sin embargo, observa la acción desde la distancia lejos de tener esta predisposición. Consciente de su picardía y del hecho de tener la llave para solucionar el episodio. Decide no poner fin al asunto de manera honorable. No está obligado a ello, pero habla de la deportividad del jugador. El tenis es un deporte de caballeros y Milos no actuó como tal. Del Potro pasó a encarar bola de rotura. A perder su servicio. Y a no volver a ganar un juego más en todo el encuentro.
Lo más flagrante llegó en la rueda de prensa posterior al partido. Cuestionado sobre el controvertido episodio, en lugar de reconocer la poca honestidad con que actuó, el canadiense se explayó tratando de defender una cuestionable postura.
"Afortunadamente el juez de línea no vio nada. Es algo afortunado para mí en ese sentido. Desafortunado para él. Es algo que en realidad podía haber caído para cualquier lado. Es más o menos lo mismo que cuando no te quedan ojos de halcón y un juez de línea se equivoca en contra tuya. Es una cuestión de mala suerte. Es difícil actuar en un punto tan grande como ése". La prensa le replicó que, independientemente de su actitud, lo cierto es que el punto debió ser de Del Potro. "Hipotéticamente, sí. Técnicamente, no" respondió Milos.
Del Potro, por su parte, afirmó lo siguiente respecto de Raonic: "Debió admitir que se equivocó. Todo el estadio lo vio. Estoy muy caliente por todo lo que pasó" sentenció el argentino según recogió BATennis.
*Vídeo de Courtney Nguyen