
Bonito encuentro el que han protagonizado Novak Djokovic y el Jaime Faria en la segunda ronda del Open de Australia 2025. Si bien a priori podría parecer que el choque iba a decidirse de forma rápida para el serbio, el joven de 21 años dio más batalla de la esperada (6-1 6-7 6-3 6-2). El pupilo de Pedro Sousa quiso presentarse ante el mundo como un jugador al que tener en cuenta en los próximos años, y dio una imagen de potencia, lucha y carisma.
Novak Djokovic quiere volver a ser el máximo favorito para ganar los Grand Slams. El diez veces campeón del Open de Australia ha recuperado el hambre competitivo tras la ansiada medalla de oro que consiguió en los Juegos Olímpicos de París 2024, que tras ella dejó entrever que su carrera estaba por terminar, pero a sus 37 años el serbio quiere más, aunque en las dos primeras rondas de este AO se haya dejado dos mangas contra dos debutantes en la categoría.
- Un primer set que nada tuvo que ver con el resto
Parecía que Nole estuviera jugando contra un jugador muy inferior a él durante el primer set, y es que rápidamente el serbio carburó y encontró la manera de hacer daño a un Faria algo encorsetado. Eso sí, Djokovic empezó a mostrar algún tipo de problemas físicos en su tren inferior nada más empezar el segundo set, hecho por el que no dejaba de estirar.
Faria empezó a golpear la bola de forma muy suelta y Novak parecía mermado al no esforzarse en según qué puntos y empezó a desquiciarse y a exclamar sus clásicos girtos hacia el banquillo formado por Andy Murray y Carlos Gómez Herrera. Terminaron el set en un tie break que el luso jugó de forma pletórica, que cerró 7-4 con una dejada a la que Nole ni intentó acudir. Faria demostró desparpajo y hambre por ganar, además de exprimir sus armas al máximo, como la potente derecha.
- Bajo techo todo cambió
La lluvia en el cielo de Melbourne obligó a parar el encuentro y fue un momento que a Djokovic le sirvió para coger un poco más de aire y volver a estar centrado en el juego. Una vez el techo se cerró, encontró de nuevo la precisión que le estaba faltando en los golpes y Faria empezó a fallar un poco más ante la solidez de su rival, y aunque el marcador diga que el tercer set fue cómodo, lo cierto es que Nole sufrió más de lo habitual en él para conseguir salir ileso.
La cuarta manga sí que fue diferente, pues el portugués no supo calcar el nivel que venía exhibiendo y se vio rápidamente por debajo en el luminoso de un partido en el que Novak Djokovic venció, pero no convenció. En tercera ronda le espera Tomas Machac, que ya le puso las cosas muy difíciles en Dubai y contra el que perdió en el ATP Ginebra 2024 por 6-4 0-6 6-1.