Estos son los grandes desafíos de Carlos Alcaraz de cara al 2025

Repasamos en qué aspectos debe mejorar el español y cuáles son los retos más difíciles e ilusionantes para él en la nueva temporada.

Diego Jiménez Rubio | 18 Dec 2024 | 10.49
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Carlos Alcaraz, grandes retos en 2025. Foto: gettyimages
Carlos Alcaraz, grandes retos en 2025. Foto: gettyimages

Si algo ha caracterizado siempre a Carlos Alcaraz es su enorme ambición y capacidad para aprender de todo lo que experimenta dentro y fuera de las pistas. El joven tenista español prepara el asalto a un nuevo curso que se antoja determinante para su trayectoria y en su anhelo de crear un legado histórico en el tenis.

Después de un 2024 repleto de emociones contrapuestas y en el que es preciso ver el vaso medio lleno, Carlos Alcaraz afronta la nueva temporada con ilusiones renovadas y un bagaje de experiencias que puede antojarse vital para una mayor madurez y consistencia. Grandes lecciones pudo extraer el murciano de un curso en el que sus dos títulos de Grand Slam constituyen una hazaña memorable, pero eso no es suficiente para un jugador llamado a hacer historia.

- Alcaraz tendrá la prioridad de ser un tenista más estable y consistente en 2025

No hay mejor remedio para cualquier paso que la autocorrección, el aprendizaje de lo vivido y el paso del tiempo. Consistencia, regularidad y madurez son virtudes que muy pocos tenistas pueden llegar a plantearse con tan solo 21 años, pero el hecho de que Alcaraz haya demostrado ya de forma recurrente que dispone de todas las armas necesarias para alcanzar la gloria, hace que su máximo anhelo para el 2025 sea perpetuarse sin ella y reducir los altibajos.

Ganar dos Grand Slam cura todos los males y hace que el 2024 deba ser calificado como un éxito para Carlos, pero lo cierto es que un jugador de su nivel está predestinado a luchar con garantías de éxito por cada torneo que dispute. No quiere el murciano seguir en esa montaña rusa de juego y emociones que le hace sentirse invencible en alguno torneos y endeble en otros, por lo que en 2025 la prioridad no será solo ganar algún otro título gran título, sino competir allá donde vaya, no dejarse ir y gestionar mejor el cansancio físico y mental para que la temporada no termine siendo una maratón agotadora.

- Los torneos Masters 1000, gran asignatura pendiente para Alcaraz

A nivel técnico y táctico también parece tener margen de mejora Carlitos, con el escalofrío que ello generará en todos sus rivales. Mejorar el servicio, subir más a la red, progresar en cambios de ritmo con el revés y encontrar con mayor recurrencia ese juego agresivo pero con margen, que tantos réditos le ha dado ya en este 2024 de forma esporádica, son las metas prioritarias para el murciano. Sin embargo, lo que más inquieta e ilusiona al mismo tiempo, es hallar la manera de ser un jugador consistente durante todo el año.

La prueba más fehaciente de la inconsistencia de Alcaraz son los Masters 1000. Bajó sus prestaciones en estos torneos respectos al 2022 y 2023, y sigue mostrándose casi inédito en eventos como Montecarlo, Roma, Canadá, Shanghái o París-Bercy, donde nunca ha sido capaz de mostrar su mejor versión. Es hora de que salga de su zona de confort y firme grandes actuaciones en algunos de esos eventos, teniendo una mayor regularidad en todos ellos.

- Ganar el Open de Australia y llegar a los eventos de final de temporada con opciones de éxito, grandes anhelos del español

Un aspecto que puede conducir a esa consistencia anhelada es la gestión del calendario. No debería tener reparos el murciano en saltarse algún torneo si no se ve en plena forma y buena disposición mental; las derrotas merman la confianza y más vale regular esfuerzos y establecer claras prioridades que acudir a eventos de máxima exigencia sin la predisposición idónea. Una regulación eficaz de esfuerzos le permitirá llegar al final de temporada con garantías de éxito en torneos tan importantes como las ATP Finals o la Copa Davis.

Por último, si hubiera que escoger un torneo en el que Carlos Alcaraz puede tener una mayor ilusión esta temporada, ese sería el Open de Australia 2025. Es el único Grand Slam que aún no ha conquistado y si fuera capaz de salir vencedor, se convertiría en el tenista más joven de todos los tiempos que gana los cuatro majors, arrebatando ese récord a Nadal. En definitiva, un año muy ilusionante y repleto de desafíos para el jugador español.