
Benoit Paire volvió a ganar un partido ATP después de dos años desde el último en Washington. Y es que el francés respondió a su público en Montpellier para derribar a Andy Murray en un encuentro que terminó remontando. Paire pasó por rueda de prensa para hablar sobre su necesario paso por el circuito Challenger para subir en el ranking, de lo difícil que ha sido para él ‘bajar al barro’ y de cómo confía aún en hacer grandes cosas.
- ¿Mucho tiempo esperando este momento?
“Sí. También hace mucho tiempo que no juego torneos de este nivel. Estuve un año jugando Challengers, aparte de Roland Garros, donde tuve una wild card. Fue un año complicado, pero no tuve más remedio que volver a los Challengers para sumar puntos y subir en la clasificación. Mi objetivo era terminar el año entre los 100 primeros y no lo conseguí, terminando el 115. Desde el Covid, ha sido difícil y no he tenido muy buenos resultados. Pero aquí, en la pista Patrice Dominguez, que es alguien que me ayudó mucho cuando era joven, significa mucho para mí. Estuve en la final aquí hace 11 años y no tengo más que buenos recuerdos. Ganar a Andy es genial, es mágico”, confesó Benoit Paire en el ATP de Montpellier.
- Tiempos complicados, apartado del circuito ATP y jugando Challengers
“Es difícil. Estaba en el puesto 18 del mundo y jugaba grandes torneos. Luego me encuentro jugando solo Challengers durante un año y contra tipos que juegan bien. Y sigo oyendo críticas de que lo único que hago es beber alcohol y que no tiene sentido que juegue al tenis. Es difícil cada día, pero creo que me he esforzado bastante y he sido recompensado por ello. Además, no he tenido ningún dolor en el tendón de Aquiles, así que todo es positivo y es una gran victoria, por eso sigo jugando al tenis”.
- ¿Qué le mantiene con esperanzas a sus 34 años?
“Me sigue apasionando el tenis, jugar en grandes pistas y disputar grandes partidos. Juego para eso, no para jugar Challengers. Creo que todavía tengo lo que hay que tener para jugar los torneos que me gustan. Físicamente, y si mantengo la cabeza en el partido, creo que aún puedo conseguir buenos resultados. No quiero acabar en torneos inferiores y arrepentirme. Soy consciente desde hace mucho tiempo de que puedo ganar a buenos jugadores. Incluso el año pasado me dije que con la calidad de tenis que tenía cuando estaba en el circuito principal, habría ganado a algunos buenos. Esta victoria me demuestra que cuando mi cabeza y mi físico están ahí, sigo siendo capaz de dar grandes golpes. Murray está al final de su carrera, pero sigue siendo un jugador difícil de batir. Tuve una gran actuación. Me encanta jugar contra este tipo de rivales y en una pista grande, soy capaz de hacer grandes cosas. Pero para jugar en una pista grande, hay que volver a los Challengers y eso no ha sido fácil”.