El tenis no consigue reencontrarse con esa magia especial que ha desprendido en otros momentos de la historia la Copa Davis. Tras muchos años a la deriva con el anterior formato y careciencia de la repercusión global que se presupone en un evento de esta magnitud, la reforma del formato competitivo promovida por Kosmos tenía la prioridad de revitalizar este evento y presentarlo como una especia de Mundial del deporte rey de la raqueta. Es un proceso complicado y que requiere tiempo, pero parece inevitable que surjan ciertas dudas cuando Taylor Fritz se pronuncia en rueda de prensa de manera tan contundente. Después de ganar su encuentro y antes de que Estados Unidos cayera en el dobles, el estadounidense dejó una triste y desgarradora reflexión que muestra el sentir de algunos tenistas destacados del circuito.
"Siempre es un honor representar a mi país, pero después de todo un año viajando y de disputar las ATP Finals no es sencillo. Me comprometí con Mardy, le di mi palabra y estoy aquí", comenta un Taylor asombrado ante el ambiente vivido en Málaga. "Me ha parecido increíble que a las 10 de la mañana hubiera tanta gente en el estadio, no me lo esperaba y ese es el camino que necesita seguir el evento", afirmó un hombre que enseguida mostró su descontento con la pista y, en especial, las bolas del torneo.
Fritz critica las bolas y la pista de la Copa Davis 2022
No es la primera vez que Fritz denuncia la ralentización del juego por culpa de las bolas y, en esta ocasión, lo hizo con más intensidad. "Durante el encuentro solo podía pensar en lo malas que son estas pelotas. La manera en que se desgastan y la imposibilidad de pegar un golpe ganador, es increíble. Me di cuenta de que no tenía sentido jugar con agresividad y asumir riesgos, era imposible desbordar. De la velocidad de la pista, no puedo ni calfiicarla, la verdad, es que resultaba imposible tanto fallar como conectar ganadores", destacó el estadounidense antes de abordar la importancia relativa que tiene el torneo a nivel mediático, tanto a nivel general como en Estados Unidos, donde no parece que este torneo haya calado hondo.
"Creo a nadie le importa realmente lo que hagamos aquí. En caso de que ganáramos el título, tengo dudas de que la ESPN informara sobre ello. No nos influye eso, nosotros todos los años tenemos ambición por ganarla, independientemente de la relevancia mediática que tenga. Posiblemente, la única manera para hacer que este torneo importe a la gente sea ganarlo en algún momento", aseveró un Taylor Fritz que tendrá que esperar a otra oportunidad para devolver a Estados Unidos la ansiada Ensaladera. Caer en cuartos de final ha sido una gran decepción para un equipo predestinado a la gloria y la amargura de estas palabras del top-10 estadounidense hacen reflexionar a cualquier aficionado al tenis sobre el devenir de esta competición.