El milagro de Suecia
Los hermanos Ymer dieron este viernes el triunfo a Suecia sobre Canadá y en rueda de prensa se dedicaron unas bonitas palabras entre los dos.


No es ganar, es cómo se gana. Ayer Suecia debutó en las Finales de Copa Davis 2021 enfrentándose a la actual subcampeona, una Canadá mermada sin sus dos máximas estrellas. Quien sí contó con sus actuales referentes fue el país escandinavo, dos hermanos de ascendencia etíope, nacidos a finales de los años 90 y encargados de llevar con orgullo la bandera sueca por todo el mundo. En el Madrid Arena, con la obligación de cumplir bajo presión, Elias Ymer y Mikael Ymer confirmaron que estando juntos su potencial se multiplica. Escucharles en rueda de prensa horas después fue una maravilla.
“Es casi un milagro, es una situación que no se puede ver en ningún otro país, te diría que prácticamente no se puede ver en ningún deporte”, reconoció Elias, el mayor de los dos. “Nuestros padres emigraron de Etiopía y ahora somos los dos mejores jugadores de Suecia, disputando el torneo de tenis más importante del mundo. Es algo que no se ve muy a menudo, pero intento apreciarlo cada día, aunque sé que todavía podemos dar mucho más”, relató después de superar por 6-4 y 6-2 a Steven Díez.
El remate vendría en el segundo turno, con la entrada a pista de su hermano dos años más joven. “Que hayamos crecido juntos y hayamos llegado hasta aquí era uno de los sueños de nuestro padre. Intento no pensarlo mucho, sobre todo en semanas tan intensas como ésta, ahora mismo me centro más en pensar en el equipo y en mi país. Obviamente, hay muchas veces que me paro a pensar los momentos bonitos que estoy pasando con mi hermano, es una historia increíble”, valoró el actual #93 del ranking ATP, el mejor clasificado de los Ymer.
Seguramente fuera Elias el primero que emocionó al mundo con su explosión, un nombre al que todos pensamos ver conviviendo en el top100 cómodamente, una barrera que de momento sigue sin superar después de muchas temporadas de bloqueo. Pero todo su esfuerzo no fue en vano, ya que Mikael cogería su testigo alcanzando lugares inexplorados por su hermano. Claro, que sin haber tenido ese referente continuo en su vida nada de esto hubiera sido posible.
“Desde el momento en que cogí una raqueta, él estuvo ahí para ayudarme”, señaló el pequeño de los Ymer tras vencer 6-4 y 6-4 a Vasek Pospisil. “Si tuviera que elegir una persona clave para que yo esté aquí ahora mismo, sin duda elegiría a mi hermano. Hemos pasado juntos cada día de nuestras vidas desde que somos críos, a día de hoy todavía lo hacemos. Tener un hermano mayor cuando estás creciendo es vital para tener un ejemplo, todo se vuelve más fácil cuando tienes unos pasos que seguir. Todavía sigo aprendiendo cosas de él, pero él también de mí”, añadió el de 23 años.
Robin Soderling, el hombre que siempre creyó en el milagro
Dos hermanos llevando todo el peso de un país y además ganado partidos suena a guion de película, pero en Madrid se está convirtiendo en realidad. Supervisando su labor como capitán de Suecia, Robin Soderling se mostró feliz en pista viendo a sus chicos dando el estirón, demostrando que Canadá no era un rival invencible. Elias se encargaría más tarde de poner en valor al ex Nº4 mundial.
“Había trabajado con Robin antes de 2018, estuvimos un año juntos. Ahora me siento igual de cómodo que en aquellos tiempos, sé que él me entiende perfectamente. No teníamos el mismo tenis, pero sí se puede decir que practicamos un estilo similar, quizá por eso comprende mis pensamientos. Él siempre estuvo ahí para apoyarme, pero al final es todo mental. Con él cerca todo fluye, tengo muchísima confianza en Robin”, sentenció el oriundo de Skara.
El plan hubiera sido perfecto si los propios hermanos Ymer hubieran jugado también el dobles, ganando los tres puntos de la serie sin la necesidad de nadie más, pero Soderling decidió reservas sus mejores cartas y colocar a Goransson y Lindstedt, quienes tumbaron por 7-6 y 6-4 a Pospisil y Schnur. Un balance de 3-0 en partidos y 6-0 en sets. Mucho cuidado con Suecia, que llevan la historia de este deporte en sus venas.