Rafa Nadal pone todos sus sentidos en Nueva York

Rafa Nadal ya ha dado el primer mordisco a la Gran Manzana con una primera ronda muy convincente ante el uzbeco Denis Istomin. El de Manacor parece haberse recuperado bien del desgaste sufrido en los Juegos Olímpicos y ha saltado a la Arthur Ashe con un tenis alegre y con mucha energía. Se ha impuesto por 6-1, 6-4 y 6-2 a un Istomin que tampoco ha ofrecido la mejor de sus versiones. El italiano Andreas Seppi espera en segunda ronda al balear.

Rafa Nadal solo había cedido cinco juegos en los anteriores dos partidos frente al uzbeco Denis Istomin, su rival en la primera ronda del US Open 2016. La previsiones eran buenas por tanto. Mejores lo serían viendo la evolución del choque. Tras un primer juego al saque ganado por Istomin, el manacorí se apuntaba los siguientes nueve juegos del partido. Y eso que no estaba precisamente desplegando su mejor versión. La primera rotura llegó casi sin quererlo, acogiendo de buen grado los errores del uzbeco, tremendamente espeso y fallón. Rafa, sin florituras pero con buenos servicios y buen tono en general, iba sacando los juegos mientras seguía viendo como su rival pifiaba bolas continuamente.

Nadal cerraba por 6-1 la primera manga, un set que no iba a pasar precisamente a la historia del tenis. Una bola de break encarada por el de Manacor, la cual salvó. En el segundo acto, la tónica siguió. Nadal se encaramaba rápido al 3-0. Poco a poco empezaría a cambiar la dinámica. Istomin despertó de su interminable letargo y su derecha comenzaba a despedir fuego. Tras un saque en el que Rafa pudo firmar el doble break, Istomin se iba a por el español y con un juego mucho más agresivo y determinado, sorprendía al ex número 1 y rompía su servicio por primera vez para ponerse 4-3 y saque.

El uzbeco era otro. Y Nadal también. Había perdido confianza y se encontraba al amparo de los misiles de Istomin, que estaba haciendo suya la Arthur Ashe. Se presentaba peligrosamente con 4-4 y con ganas de seguir escalando en el set. Rafa, con oficio y templando los nervios, supo detener la hemorragia y elevar el cinco a su marcador. Ese siguiente resto sería vital y Nadal lo entendería a la perfección. Le quitó de las manos las riendas del peloteo al uzbeco y con una pujante derecha desarbolaba su tenis para poner el 6-4 en el luminoso. Un segundo set en el que por fin se vieron dos tenistas sobre la pista central.

En la tercera manga Istomin quiso acechar el saque de Rafa y soñó brevemente con liderar el marcador por primera vez desde el juego inicial del partido. Opción de break para él que el manacorí le negó materializarla con un buen servicio. Nadal alternaba buenos puntos, jugando con intensidad y moviendo al uzbeco con otros algo más grises. Algo lógico de una primera ronda. Lo importante es que sabía cuando apretar y lo llevaba a la perfección. En 3-2 y saque de Istomin, Nadal asestó el golpe definitivo sobre la mesa colocando un 'passing' descomunal al tenista asiático. Un 'drive' paralelo como contestación a un palo brutal de Istomin. Ese no fue un golpe más, era el que valía por un 4-2. Rafa se tiró en plancha a por el partido y sin miramientos cerraba por un 6-2 final un choque con el que salía muy satisfecho. Solo un breve momento de zozobra en el segundo set. Lo demás, dominio claro del español, jugando con alegría, confianza y sacando muy bien, algo esencial en las pistas duras del US Open. Andreas Seppi será su rival en segunda ronda.