La progresión que Martín Landaluce está viviendo, especialmente en la segunda parte del 2024, resulta significativa y empieza a asustar a sus coetáneos. El madrileño, que ya saboreó las mieles de su primer título en Olbia, vuelve a las semifinales de un ATP Challenger también en tierras italianas. Esta vez fue en el norte, en Rovereto, donde dejó atrás a Geoffrey Blancaneaux en un duelo durísimo (7-6(6), 6-4) de más de 2 horas y 15 minutos. El pupilo de Óscar Burrieza le dio la vuelta a un break de desventaja en un primer set peleadísimo en el que impuso su inercia positiva en la muerte súbita; no miró atrás en el resto del partido, colocándose entre los cuatro mejores. Martín persigue un puesto en las NextGen Finals: un título aquí le aseguraría su lugar en Jeddah.
Landaluce no afloja el pistón y se planta en su quinta semifinal de Challenger