Buscando dar un salto de calidad en su carrera, Luca Van Assche apostará a partir de estas semanas por sumar una nueva figura a su equipo: Vincenzo Santopadre. El jugadora francés y el técnico italiano prometen grandes aventuras.
Cualquiera querría estar con 19 años en el lugar que ahora mismo ocupa Luca Van Assche, dentro de los 70 mejores del ranking ATP y con proyección para seguir avanzando casillas del tablero más pronto que tarde. Sin embargo, a estas edades es normal tener prisa, algo que puede ser positivo si se encara desde la ambición y las ganas de trabajar. En este caso, su idea pasaba por añadir una figura referente dentro de su equipo de trabajo, alguien que le ayude a marcar las diferencias. Tras el casting, el elegido ha sido Vincenzo Santopadre, el hombre que llevó a Matteo Berrettini a ser finalista de Grand Slam y número 6 del mundo. El jugador lo explica todo en este pequeño reportan para L’Equipe.
“Estaba buscando a una persona que pudiera trabajar en colaboración con Yannick, mi entrenador principal. El año pasado ya probé con Maxime Teixeira, que ha cumplidos diversas funciones desde septiembre. De cara al futuro será complicado que Yannick pueda hacer todas las semanas conmigo, así que es positivo tener el discurso de una segunda voz. Pensé mucho en ese perfil, le pregunté a Yannick, hablé con personas de la FFT y me propusieron algunos nombres. He tenido a varias personas al teléfono, entre ellas Vincenzo. Poco a poco hemos ido avanzando, hasta que por fin he tomado la decisión”, confiesa el tenista nacido en Bélgica, aunque nacionalizado francés.
“Antes de esta llamada telefónica no nos conocíamos, nunca habíamos hablado. Es una persona que puede traerme experiencia, la que tuvo en el circuito con Berrettini. Tiene un gran estado de ánimo, es positivo, es alegre, es alguien en el que seguro confiaré. Tiene grandes habilidades como entrenador y lo ha demostrado estos últimos años, de momento ya se lleva muy bien con el resto del equipo, lo cual es muy importante. Es una gran noticia que pueda trabajar mano a mano con Yannick, estoy deseando que empiece”, asegura el actual Nº68 de la clasificación mundial, tercer jugador más joven entre los cien primeros del ranking.
PUNTO DE PARTIDA
Santopadre, que llegó a ser #100 del mundo a finales del siglo pasado, se quedó sin trabajo en octubre de 2023, cuando se conoció la ruptura inesperada con el jugador que él mismo moldeó, Matteo Berrettini. Cuatro meses después, un proyecto precioso llama a su puerta para devolverle al circuito profesional, una oportunidad magnífica para confirmar que lo conseguido con el romano no fue casualidad. Su primera toma de contacto se dará en el ATP 500 de Rotterdam, torneo que se celebra del 12 al 18 de febrero. Tras hacer las maletas en primera ronda de Marsella, seguro que las aspiraciones del tenista galo pasan por vengarse en su próxima cita, ya con la compañía del técnico transalpino.
“En Rotterdam estarán los dos entrenadores conmigo, para que Vincenzo vea cómo trabajamos y ayudarle a entrar lo más rápido posible en la inercia del equipo, para que observe también cómo actúo y cómo pienso dentro de la pista. Obviamente, no tengo el mismo estilo de juego que Matteo Berrettini, pero para un buen entrenador no hay diferencias en si su jugador mide dos metros o si es un poco más pequeño”, subraya Luca con una sonrisa. Habrá que seguirles muy de cerca de aquí a final de temporada, sobre todo en la gira de tierra batida.