
Pese a tener 38 años y estar en la última etapa de su carrera, vencer a Stan Wawrinka sigue significando uno de los retos más especiales dentro del circuito masculino. Mucho más si ocurre en la superficie favorita del suizo, la tierra batida, aunque también era la de Jaume Munar. El balear sacó su mejor versión este jueves para tumbar al tricampeón de Grand Slam (7-6, 6-1) y avanzar a los cuartos de final del ATP 250 de Gstaad, donde le espera el argentino Pedro Cachín.