Un servicio para gobernarlos a todos

El canadiense ofrece una clase magistral sobre el significado del servicio en el tenis actual y explica cómo lo trabajó desde su época de junior.

Fernando Murciego | 25 Jun 2016 | 11.24
facebook twitter whatsapp Comentarios
En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.
En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.

Piensen en Milos Raonic. Imagínenlo al otro lado de la red. La primera escena que aterriza en la mente es la del canadiense conectando un ‘ace’. Y otro. Y otro. Hablamos, según el propio jugador, del mejor servicio del circuito masculino. Probablemente no se equivoque el oriundo de Podgorica. Para conocer mucho más esta herramienta de acoso y derribo, el actual número siete del mundo la analiza en Daily Mail con una suculenta sesión fotográfica para acompañar.

“El servicio es un elemento muy técnico y complejo. No se trata de fortalecer mis músculos, tiene que ver más con evitar lesiones, tratar de que mis hombros y mi espalda estén siempre bien colocados, para que todo mi cuerpo pueda soportar toda la tensión”, afirma Milos acerca de cómo ejecutar el primer golpe en el tenis.

“Como sucede con los jugadores de baseball, se puede ver cómo mis huesos están un poco más doblados que los de otros deportistas con la intención de que pueda abrir mucho más mi hombro que la mayoría. Esto me hace tener mucha más palanca. Muchas de mis articulaciones en esta zona ya no van hacia el interior debido a la repetición del movimiento, aunque es algo a lo que mi cuerpo ya se ha adaptado”, añade.

Pero esta suerte que hoy le sonríe, en su día le causó más de un problema. “Yo siempre estuve por encima de la altura media, aunque todo se empezó a descoordinar a partir de cumplir los 16 años. Ese fue el motivo por el que nunca fui un gran junior. Por aquel entonces, mi entrenador me decía que el saque no era únicamente la forma de empezar el punto, también era una manera de acabarlo”, recuerda el montenegrino.

“Solía ir a las pistas todos los días a las 05:30 de la mañana cuando todavía no había nadie allí. Entonces empezaba a practicar el saque durante dos horas. Tengo las piernas largas y un torso pequeño, son extremos opuestos para un cuerpo como el mío. Gasto un 47 de zapatilla y tengo unas palancas que me ayudan a extender el alcance de mi raqueta. También he trabajado mucho en la altura, para golpear en un punto más alto la pelota, lo que me da más espacio para apuntar y buscar diferentes ángulos. Normalmente solía meter el 63% de mis primeros saques, hoy en día meto el 66%”, atestigua el campeón de ocho títulos profesionales.

“La mayoría de las personas piensan que el saque es todo hombros y brazos, se olvidan de que las piernas también juegan. Afortunadamente tengo también unas piernas fuertes. Cuando conectó el golpe puedo estar seis u ocho pulgadas de distancia con el suelo, pero lo importante es conectar el golpe en el lugar correcto. Intento hacerlo siempre desde el mismo punto para que mi rival nunca sepa lo que voy a hacer. A partir de aquí, el brazo se encarga de la dirección y la muñeca de la potencia y el efecto”, enumera uno de los grandes sacadores del s.XXI.

Para terminar, una nueva lección y una reflexión final. “Hay diferentes tipos de servicio: el que salta mucho, el que va con mucho efecto, el que saca al cuerpo, el que saca a la ‘T’, el plano más clásico. Voy usándolos todos según el oponente y la superficie. En hierba por ejemplo puedo usar más el cortado, es más eficaz; en pista dura el más efectivo es el golpeo plano, el más rápido de todos. Hay un par de tipos más altos que yo en el circuito, me gustaría encontrármelos en pista. Pete Sampras no era el más alto pero tenía unas grandes palancas. Siempre entendí que sería el saque lo que algún día me haría ganar o perder”, concluye.