Javier Martí pasó la fase previa del ATP Challenger de Madrid, firmando una historia de cuento de hadas. A sus 31 años y en su primer torneo profesional en tres años y medio, tras haberse retirado del tenis y haber pasado a los banquillos, el madrileño estaba ansioso por darle continuidad a un cuento ya de por sí precioso. No pudo ser, sin embargo, en su debut en el cuadro final. Javi sucumbió al quinto cabeza de serie, el austríaco Sebastian Ofner, si bien compitió hasta el final y mostró una capacidad de lucha y sacrificio espectacular (7-5, 6-4). Exprimió hasta la última gota de sudor y se marcha del torneo con la sensación de seguir siendo ultracompetitivo tras más de tres años fuera de las pistas, algo de lo que no muchos podrían presumir.