Nadal y Djokovic se dan un homenaje a la altura de su rivalidad

Los dos titanes del tenis protagonizaron un partido en el que ambos mostraron la esencia que les ha acompañado durante tantos años.

Óscar Belloch | 19 Oct 2024 | 20.10
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Rafa Nadal y Novak Djokovic en la Six Kings Slam. Foto: Getty
Rafa Nadal y Novak Djokovic en la Six Kings Slam. Foto: Getty

Novak Djokovic logró el tercer puesto en la Six Kings Slam gracias a su victoria sobre Rafa Nadal por 6-2 7-6  en  un choque que significó el punto final a todo un clásico tenístico. Un total de 60 veces se habían enfrentado estas dos leyendas antes de este partido de exhibición en Arabia Saudí, y la grada se llenó para ver una última vez este enfrentamiento que nunca creímos que iba a terminar, pero como dijo Rafa en su vídeo de anuncio de retirada, "todo tiene un principio y un final". 

Rafa Nadal y Novak Djokovic han protagonizado a lo largo de los últimos 18 años una de las rivalidades más grandes, ya no del tenis, sino de todo el deporte mundial. Dos jugadores completamente opuestos a los que les une una misma aptitud: el afán competitivo más extremo. Entre ambos, 16 finales ganó Djokovic y 13 las ganó Nadal, y aunque hoy no era una final, este encuentro en la Six Kings Slam se trató de una especie de homenaje a la era más dorada que nos ha dado el tenis.

Un primer set frío para Nadal

Las dobles faltas fueron un lastre para Rafa desde el inicio del partido, pues cometió cinco y además en momentos que no tocaban. El balear saltó a pista con claros síntomas de falta de competitividad y no logró hacer frente a la regularidad de un Nole que, a pesar de su veteranía, sigue manteniéndose como uno de los mejores jugadores del mundo. Nada más empezar, Nadal ya perdió su saque y lo arrastró durante todo el set, pues no logró encontrar ninguna brecha en el sólido juego de Djokovic. A pesar de eso, Rafa lo intentó todo en la primera manga y cambió un poco su estilo al ver que intentar mantener vivo el punto no era suficiente, e intentó jugar con algo más de potencia en los golpes, pero sin suerte.

Una marcha más

Ya en el segundo set, las dobles faltas volvieron a hacerse presente en el primer turno de saque de Nadal y terminó cediéndolo, aunque rápidamente tuvo una reacción y consiguió dar la vuelta al marcador en contra, levantando el puño como tanto le caracteriza. Rafa supo volver a ofrecer tintes de su grandeza y consiguió cuajar algunos puntazos con potentes derechas y reveses, pero Djokovic puso una marcha más y llegó a sacar para ganar el partido.

Rafa nunca da nada por perdido

Cuando todo el mundo ya creía que Djokovic iba a cerrar el segundo set 6-4, Rafa apareció por todo lo alto y sacó su mejor versión para romper y llevar a un incrédulo serbio al tie break, aunque el sueño terminó en ese emocionante desempate que ambos jugaron al máximo.

Nada más jugarse el último punto, Nadal y Djokovic se fundieron en un caluroso abrazo que significó un bonito epílogo a esta historia en la que no debemos llorar porque terminó, sino sonreír porque fuimos afortunados de vivirla.