Stan Wawrinka se marchó de Buenos Aires con las manos vacías tras un auténtico partidazo ante Nico Jarry. Un varapalo para el suizo en el que apenas es su segundo torneo del año, pero una demostración de que el nivel para jugarle de tú a tú a los mejores sigue estando ahí.
Aterrizaba Stan Wawrinka en la rueda de prensa del ATP Buenos Aires 2024 con lágrimas en los ojos. Eran fruto de la emoción tras un duelo agónico, con la grada absolutamente volcada, en la que terminó claudicando ante Nicolás Jarry tras sacar para ganar el encuentro en el tercer set. A pesar de ello, l ambiente generado en la capital argentino llenó al suizo de orgullo, convirtiéndose en gasolina para seguir apuntando a nuevas metas a pesar de haberlo ganado -casi- todo en el circuito. Del combustible que aún le queda, de confiar en el proceso y de lidiar con este tipo de derrotas habló ante los medios un Wawrinka que mostró su habitual madurez a través de cada una de sus palabras.
- Lágrimas en sus ojos tras una dura derrota
"No es fácil, la verdad. Fue un partido muy duro. Siempre es difícil perder así, sobre todo después de un partido tan duro y tras haber sacado para ganar. Tuve la oportunidad de cerrarlo varias veces y no pude. Hice todo lo que pude para acercarme a esa situación, me empujé al máximo en cada momento. Disfruté enormemente del ambiente, del apoyo de la gente. Aprecio muchísimo ese cariño de la gente, no lo doy por sentado, traté de disfrutarlo y aprovecharlo lo máximo posible. Es difícil perder un partido así, porque ahora sé que no voy a jugar en varios días".
- ¿Son más difíciles de digerir estas derrotas en esta etapa de su carrera?
"Cada derrota es difícil de digerir. Seguramente ahora sean un poco más difíciles de digerir porque sé que ya no queda tanto camino. Este partido fue tan emotivo para mí porque vi tanto apoyo en la pista, tanto cariño de la gente, que me puse al límite para tratar de conseguir la victoria. Intenté mantenerme positivo todo el partido, en general mi nivel fue bueno. Hay muchas cosas positivas que puedo extraer de este torneo, mi nivel fue muy bueno, éste es únicamente mi segundo torneo del año. Fue difícil perder un partido tan grande, me hubiese encantado quedarme algo más de tiempo aquí en Buenos Aires".
- Confiar en el proceso
"Confiar en el proceso significa hacer las cosas de la manera correcta cada día, confiar en que a veces necesitas tiempo para que salgan las cosas. Debes confiar en que haces las cosas bien en todo aquello que puedas controlar, que das el máximo por lo que quieres. A partir de ahí, más tarde o más temprano conseguirás los resultados que quieres. Para mí, confiar en el proceso es más una actitud, una mentalidad, sobre todo en el momento en el que me encuentro de mi carrera: hacer las cosas bien cada día, seguir luchando y seguir estando positivo a pesar de derrotas como ésta. Estoy tranquilo porque sé que me llevé al límite todo el partido, que seguí positivo y peleé hasta el final".
- El increíble apoyo del público argentino
"Por supuesto que les entendí durante todo el partido. El público es uno de los motivos por los que sigo jugando, y éste en especial es uno de los motivos por los que volví a Argentina. Siempre intento apreciar al máximo el apoyo del público, repito, es algo que jamás doy por sentado. El ambiente ha sido increíble. Sé que tomé la decisión correcta al volver aquí 11 años después".
- Su relación con Magnus Norman
"Tenemos la misma mentalidad, intentamos ser siempre muy positivos, es alguien que me motiva, me lleva al límite. Una de las claves, no solo en el tenis, es que es una persona muy honesta conmigo. El motivo por el que seguimos trabajando juntos es que yo sigo intentando ser honesto conmigo mismo y él también, vayan las cosas bien o mal. Tenemos la misma mentalidad: controlamos lo que podemos controlar, intentaremos ganar más partidos y torneos en los próximos meses. En cuanto a los mejores momentos, es difícil elegir, la verdad. Son muchos (risas). Es difícil no quedarme con el hecho de ganar un Grand Slam, especialmente cuando el primero lo conseguí a los 29 años, después de tanto tiempo en el circuito. Para mí, ahora mismo lo más importante es seguir disfrutando de los grandes partidos, jugar contra top-20, darme la oportunidad de ganar a grandes jugadores, disfrutar de las emociones que me generan este tipo de partidos. Perderlos es duro, pero volveré a entrenar más duro para seguir ahí".