El coaching y los toilet breaks en el tenis: ¿una puerta hacia las trampas?
Analizamos, tras el incidente entre Tsitsipas y Zverev en Cincinnati, el papel del coaching y los toilet breaks en el tenis. ¿Hay que regular ambas cosas?


Stefanos Tsitsipas y Alexander Zverev se enzarzaron hace unos días en un episodio que dio la vuelta al mundo. ¿El motivo? El excesivo tiempo que había empleado el griego en su primer (y único, como estipula la regla en partidos al mejor de tres sets) toilet break durante su duelo de semifinales del ATP Cincinnati 2021. El tenista heleno se fue a vestuarios con raquetero y bolso incluido: mientras empleaba hasta ocho minutos dentro, su padre, Apostolos, se encontraba chateando con su móvil.
Zverev decidió pasar a la acción y se quejó al árbitro, planteando la posibilidad de que Stefanos y Apostolos estuviesen comunicándose a través del teléfono móvil, algo estrictamente prohibido. Ocho minutos estuvo dentro Tsitsipas, que no contento con ello le pidió al árbitro volver a ir a vestuarios a la conclusión del segundo parcial. El árbitro le recordó que ya había agotado su único parón, y que todo lo que fuese ir más allá de los 90 segundos estipulados por descanso significaría empezar a sumar warnings, con el riesgo de perder puntos.
Tsitsipas no efectuó ese segundo toilet break, Zverev acabó llevándose el gato al agua en el tercer set y el problema no pasó a mayores. Es aquí cuando nos debemos plantear la siguiente cuestión: ¿la legalización del coaching en pista hubiese evitado este incidente? ¿Utilizan los jugadores los toilet breaks como una posible 'artimaña' para romper el ritmo de los rivales y, fuera de los límites de la legalidad, encontrar maneras de enfriar o cambiar el signo del partido?
En nuestro último vídeo en Youtube hemos debatido acerca de qué puede hacer la ATP para evitar estas situaciones, además de dar nuestro punto de vista acerca de si la propuesta de legalizar el coaching, hacia la que el propio Tsitsipas se posicionó claramente a favor en las últimas semanas, nos resulta una proposición verdaderamente beneficiosa para el tenis.
Y vosotros, ¿qué pensáis? ¿Coaching sí o coaching no? ¿Se deben, además, regular los toilet breaks de manera que se establezca, por ejemplo, un límite de tiempo? ¡Esperemos que os guste el vídeo y nos dejéis vuestras propuestas en los comentarios!