Albert Ramos venía de cosechar dos grandes triunfos en el desierto californiano. Dado las buenas condiciones de la pista y de las bolas para su juego, logró adaptarse a las mil maravillas a una superficie muy lenta. Sin embargo, no pudo concretar una nueva victoria: cayó frente al georgiano Nikoloz Basilashvili por 4-6, 7-6(2) y 6-2 en los octavos de final del Masters 1000 de Cincinatti. El español llegó a sacar para partido en el segundo set cuando sirvió 6-5.