Djokovic emerge con fuerza ante el gran desafío planteado por Bautista

El serbio estuvo a dos puntos de perder un partido en el que sufrió molestias en el cuello, pero salió indemne de un partido agónico tras casi 3 horas de lucha.

Diego Jiménez Rubio | 29 Aug 2020 | 00.15
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Novak Djokovic gana a Roberto Bautista en Cincinnati 2020. Foto: gettyimages
Novak Djokovic gana a Roberto Bautista en Cincinnati 2020. Foto: gettyimages

Batalla a tumba abierta entre dos de los máximos exponentes de la consistencia y solidez en el circuito que terminó en un partido maratoniano y agónico. El tenis ha vuelto para noches como esta y tanto Novak Djokovic como Roberto Bautista honraron a este deporte con su entrega, actitud y buen juego. En un duelo repleto de alternativas, idas y venidas de uno y otro, y con ambos aferrándose a cualquier esperanza, el serbio terminó ganando por 4-6 6-4 7-6 (0) y es finalista del ATP Masters 1000 Cincinnati 2020, prolongando su racha de imbatibilidad.

Se cumplieron las expectativas del partido desde el inicio de la primera manga, con largos y vibrantes peloteos en los que Roberto intentaba coger la iniciativa con su derecha y no renunciaba a buscar cambios de dirección constantes. Habitualmente la gran tara en los encuentros del español ante Djokovic es el intercambio de revés a revés, pero ahí es donde se vio cierta debilidad en el serbio en esta ocasión, sin la contundencia habitual en su mejor golpe. Buscaba dejadas con recurrencia y la mayoría a destiempo para intentar acortar puntos ya que de fondo no veía huecos. El español hizo break en el tercer juego y no se desmoralizó al ver que su rival le equilibraba, sino que volvió a romper en el séptimo y cerró con solidez.

Las molestias en el cuello de Novak eran palpables y solicitó un tiempo médico mediado el segundo parcial, que pareció aclararle las ideas. Empezó a tirar con mayor potencia y profundidad, a jugar más ordenado y meterse en pista, donde poder cerrar el punto con muchas más garantías que antes. Bautista no renunció a la batalla ni siquiera cuando en el marcador campeaba un preocupante 1-4 y bola de break a favor del serbio.

Sacó adelante ese juego y equilibró el marcador, dejando muy tocado a Djokovic tras intercambios espectaculares. Sin embargo, cuando todo parecía a su favor, Novak tiró de intangibles para ganar el noveno juego y todo cambió por completo. Decidieron tapar la pista Louis Armstrong por previsión de lluvia, y el cambio no benefició en absoluto a un Bautista que se despistó sobremanera en su turno al saque, hastiado por el hecho de que un torneo outdoor sin pista cubierta disponible, aproveche el contexto actual y se emplee el techo retráctil como medida preventiva.

La influencia de eso fue más a nivel mental que tenístico, y en ese primer momento que en el transcurso del tercer set. Algo cambió en el encuentro, con un Djokovic mucho más cercano a su mejor nivel, incrementando la intensidad y dictando él continuamente en los puntos. Bautista se resistía a dejarse avasallar y hubo pelea hasta el final, pero un sexto juego inconmensurable del serbio y un séptimo en el que superó una bola de rotura y abrió hueco, parecían condenarle. Ahí es donde se vio de qué pasta está hecho este jugador y cómo Novak tenía algún resquicio en su mente y en su juego que habitualmente no se atisba.

Con 5-2 arriba y con serias opciones de cerrar el partido, un par de errores a destiempos del balcánico devolvieron la confianza a Bautista, competidor impresionante y voraz. Se reenganchó al partido dispuesto a colarse por esa debilidad que se manifestaba de forma sutil pero esperanzadora al otro lado de la pista. Volvió a jugar más profundo y a agotar con una consistencia sobrehumana y gran selección de tiros, a un Djokovic fatigado.

Cuatro juegos consecutivos, saque para ganar el partido y reacción del chacal. El partido se fue a un tiebreak donde los galones de uno de los mejores de la historia salieron relucir con fuerza y cerró con una contundencia imprevisible unos minutos antes, cuando estuvo al borde del abismo. Novak Djokovic es finalista del ATP Masters 1000 Cincinnat 2020 y se verá las caras con Milos Raonic. El espectáculo continuará tras un encuentro que puede ser punto de inflexión en esta temporada.