
Después de la victoria de John Millman ante Michail Pervolarakis por 4-6 6-1 y 7-6(1), Grecia necesitaba ganar imperiosamente el segundo punto ante Australia en la ATP Cup. Stefanos Tsitsipas y Nick Kyrgios eran los llamados a disputar este encuentro crucial. En ATP tan sólo se habían enfrentado una vez, en la pasada edición del torneo de Washington, cuando Kyrgios se impuso en tres trabajados sets, 6-4 3-6 7-6(7). El encuentro de hoy iba a ser vibrante, con un Tsitsipas que necesitaba ganar sí o sí frente a un talentoso jugador arropado por su público y en un escenario en el que, a diferencia de otras ocasiones, iba a poner toda la carne en el asador para imponerse a su rival.
El griego comenzaba el encuentro con un turno de saque inmaculado y Kyrgios respondía haciendo lo propio. Esta dinámica podía darnos una idea del guión que iba a seguir este encuentro. A lo largo de todo este primer set, ningún jugador fue capaz de gozar siquiera de un sólo punto de break. Los servicios iban solventándose a 0 o a 15. En el undécimo juego, con 6-5 a su favor, Kyrgios fue capaz de empujar y hacer un último esfuerzo para tratar de evitar el tie break, forzando la primera situación de deuce del partido, pero sin llegar a saborear bola de set; Tsitsipas se aplicaba y evitaba males mayores, y el primer set se decidiría en la muerte súbita.
El tie break comenzaba con un Tsitsipas ambicioso buscando terminar el punto en la red, pero Kyrgios pudo sorprenderlo con un tiro cruzado a los pies para obtener un minibreak inaugural; en un abrir y cerrar de ojos, el australiano estaba con 3-0 y ponía en aprietos al griego, que con su saque volvía a buscar la red nuevamente para obtener su primer punto en el desempate. En el sexto punto, tras un gran primer servicio, Kyrgios estrellaba una bola fácil a media pista contra la red y la igualdad volvía al marcador. Stefanos volvía a dilapidar la ventaja errando una derecha invertida, pero volvía a recuperarla a continuación. El tie break estaba siendo un fiel reflejo de la igualdad que había reinado durante toda la primera manga. Con bola de set en contra, Tsitsipas cargaba todo el juego al revés de Kyrgios, que en el momento que pudo se invirtió y se jugó una derecha que se marchó fuera. Con 6-6, un inoportuno error del griego en su turno de servicio dejaba al aussi en disposición de cerrar con su saque; sus ansias de protagonismo le impulsaron a jugar un tiro entre las piernas cuando no tocaba y finalmente terminó perdiendo el punto con una derecha arriesgada que se marchó por el pasillo de dobles. Con punto de set a favor, esta vez al resto, el australiano fue capaz de materializar y llevarse el primer parcial por 7-6(7).
El guión del primer set parecía extrapolable al segundo. Sin embargo, en el tercer juego, Kyrgios tenía que afrontar dos bolas de break en contra, escenario inédito hasta el momento. El australiano fue capaz de reconducir la situación, conectando incluso un ace de segundo servicio. Los intercambios brillaban por su ausencia; ambos tenistas buscaban terminar los puntos por la vía rápida, apoyados por sus respectivos servicios. En cualquier caso, ello no impedía que pudiéramos disfrutar de algunos detalles de mucha calidad que, indudablemente, atesoran ambas raquetas. Con la salvedad de esas dos bolas de break, el set avanzaba inexorablemente hacia un nuevo desempate. En esta ocasión, Tsitsipas comenzaba con mejores sensaciones y era el primero en golpear; en el cuarto punto del tie break, el griego conseguía romper el fortín de su oponente y se colocaba 3-1 arriba. Grecia necesitaba con urgencia amarrar ese set. Kyrgios tampoco estaba demasiado centrado y Stefanos aprovechó la circunstancia para anotarse un segundo break y colocarse con 6-2. Finalmente, con su servicio, el jugador heleno cerraba la manga por 7-6(3) e igualaba la contienda.
Todo iba a decidirse en el tercer y definitivo set. La tónica del encuentro se antojaba inamovible; el servicio dictaba también el transcurso de este parcial a pesar del denodado interés por ambas partes de abrir brecha en el marcador. En el séptimo juego llegaba la primera amenaza; el buen hacer de Kyrgios y las dudas de Tsitsipas propiciaron la aparición de una bola de break favorable al aussi, que finalmente no pudo convertir. Esa opción de rotura se perdió como una gota en el océano y, a golpe de saque, llegamos a un nuevo tie break.
Tsitsipas jugaba con determinación y tomaba ventaja con un minibreak en el tercer punto, pero Kyrgios recuperaba la igualdad inmediatamente tras emplearse a fondo en un peloteo en el que al griego se le iba un revés más allá de la línea de fondo. Kyrgios alternaba derechas cortadas con obuses tremendos y también rompía el ritmo que precisas dejaditas. El jugador heleno contestaba con un tenis agresivo, moviendo de lado a lado al tenista local. Con 6-5 a su favor, el australiano tenía su primera bola de partido al resto. Tsitsipas erraba el primer servicio y su oponente se lanzaba con todo para jugar un resto ganador de revés paralelo. La bola encontró la línea y Nick Kyrgios se impuso a Stefanos Tsitsipas en tres sets, 7-6(7) 6-7(3) 7-6(5), en dos horas y 38 minutos.
En el transcurso del encuentro, el australiano logró conectar 59 golpes ganadores por 56 de su rival y 34 errores no forzados por 22 del tenista heleno.
De esta manera, Australia derrota a Grecia por 2-0, a la espera de lo que suceda en el partido de dobles.