Serena, Venus y un partido con mucho en juego

El morbo se apodera del US Open con el partido que enfrentará a las hermanas Williams. Hacemos un repaso de lo que ha sido este duelo a lo largo historia.

Fabián Valeth | 8 Sep 2015 | 13.20
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En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.
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Este martes –miércoles en la madrugada de España- el US Open ofrecerá un plato fuerte digno de la atmosfera que rodea la edición de este torneo. Qué mejor que en el camino de Serena Williams en la búsqueda de ganar los cuatro Grand Slam del año aparezca su hermana Venus, raqueta capaz de poner a tambalear ese ansiado objetivo de la número uno del mundo.

Venus ha encontrado una plenitud máxima en este torneo estadounidense. Aunque inició con algunos despistes en sus dos primeras presentaciones, en las dos últimas han sacado a la luz un tenis resplandeciente y propio de su naturaleza; siendo muy superior ante una Belinda Bencic magnificada por lo que provocó en la gira previa y a la jovencita Anett Kontaveit, que terminó petrificada ante el inmenso nivel de la mayor de la dinastía Williams: impoluta con el servicio, con la derecha dulce y demostrando una gran movilidad a pesar de su 35 años.

Del otro lado de la red estará Serena, con una temporada inmaculada en la mochila donde ha logrado casi todo lo que ha tenido por delante. Y este US Open ha servicio como punto para mejorar la confianza que parecía un poco perdida en las últimas semanas. De hecho, su anterior encuentro ante Madison Keys fue el reflejo de que las cosas en la uno mundial han ido mejorando, principalmente el servicio, golpe con el que en las últimas jornadas ha demostrado algunas inestabilidades. Desde allí la confianza va a la alza y se hace casi imposible provocarle ahogo alguno.

Pero el duelo ante su hermana puede ir más allá del presente o, de otra forma, reafirmar lo impoluta que es la ganadora de 21 grandes. En lo que será 27º enfrentamiento entre ambas, la balanza se va hacia el lado de Serena quien ha alzado los brazos en 15 de los anteriores encuentros y tiene como plus haberse quedado con el triunfo en el más cercano cruce, el que sucedió en octavos de Wimbledon y terminó siendo poco ajustado a lo que tal vez se esperaba en la previa. Para encontrar el éxito más reciente de Venus hay que trasladarse hasta Canadá en 2014, allí se valió de una gran remontada para alcanzar la final que posteriormente perdería ante Radwanska.

En este Grand Slam ocurrirá el quinto enfrentamiento de un historial igualado en dos y que en un par de ocasiones las vio midiéndose en la lucha por el título. En 2008 estuvieron dando pelea en la misma instancia en que se verán este martes y el triunfo se decantó hacia el lado de la menor, quien se impuso en un peleado partido que se resolvió en dos intensos tiebreaks.

Lo cierto es que este nuevo cruce entre ambas promete ser totalmente diferente a los demás partiendo del contexto que las va a arropar. Dos tenistas de la misma sangre luchando por estar más cerca de la final y una de ellas por cumplir una proeza que la última que la vivió fue Steffi Graf en 1988; la otra, por estar por primera vez en una semifinal de un major desde 2010 y sentirse cerca de un nuevo título grande, algo que no llega desde Wimbledon en 2008.

¿Será capaz Venus de privar a su pariente de la epopeya que se viene gestando desde hace meses y sentirse nuevamente como estrella de un circuito que supo dominar tiempo atrás? ¿O impondrá Serena esa condición de invulnerable que viene demostrando desde hace tiempo? La pista Arthur Ashe, la más grande de tenis en el mundo, será testigo de uno de esos dos finales que esperamos sea espectacular, grandioso y, por qué no, dramático.