“Me fijo mucho en Swiatek, lo mejor que tiene es la mentalidad”

Marina Bassols disputa esta semana el WTA de Valencia, donde busca construir de nuevo el camino de la confianza que la lleve a irrumpir en el top100.

Fernando Murciego | 11 Jun 2024 | 22.24
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Marina Bassols en su entrevista con Fernando Murciego. Fuente: Punto de Break
Marina Bassols en su entrevista con Fernando Murciego. Fuente: Punto de Break

Los planes de Marina Bassols (Blanes, 1999) se torcieron el pasado mes de abril cuando disputaba el WTA 125K de La Bisbal. En su partido de octavos de final, la española se tuvo que retirar al sufrir una lesión en su pie izquierdo. Adiós al resto de la gira y a sus aspiraciones de ser top100 a corto plazo, aunque al menos tuvo tiempo de llegar a la Qualy de Roland Garros, donde cedió en su primer compromiso.

Volver de una lesión nunca es sencillo, aunque el ánimo que presenta la catalana es optimista. Recorriendo ya los últimos metros de la recuperación, los resultados en los dos últimos torneos no han sido los esperados, pero todo puede cambiar esta semana en el BBVA Open Internacional de Valencia, una ciudad donde siempre cosechó alegrías. Marina se sienta con Punto de Break para ponernos al día de su situación y atreverse con una atrevida apuesta.

¿Cómo estás?

De la lesión estoy bien. Cuando me la hice me dijeron que tendría unas 6-8 semanas de recuperación, ya estoy entrenando al 100% sin dolor. Aunque solo he jugado dos partidos desde que volví, me encuentro mejor. Noto que me falta ritmo, me falta intensidad, al estar un tiempo parada es como que tienes que conectar todo otra vez. Por suerte, con trabajo todo se soluciona, forma parte del proceso, lo bueno es que cada día me veo mejor.

Menudo susto te llevaste…

Cuando me lo hice, sí. Mucha gente me preguntó después de retirarme, pero no podía decirles nada porque ni yo sabía lo que tenía, estaba esperando los resultados. Fue muy duro también por el timing, en ese torneo me estaba jugando los puntos para el cuadro principal de Roland Garros, creo que si ganaba ese día ya casi me clasificaba, aunque luego tenía otra oportunidad en el 100K de Zaragoza.

¿Cómo fue el momento de la lesión?

En el segundo punto del partido. Me tiraron un cortado, fui a por la bola y al apoyar el pie noté que me petó el hueso internó del tobillo. Seguí jugando, me puse 0-40 al resto, pero me acabó remontando. En el cambio pedí que me hicieran un vendaje fuerte, a ver si así evitaba el dolor, pero sacando no podía, en el impulso me dolía mucho. Ahí vi que no podía continuar y me retiré, no podía ni dar un paso.

Marina Bassols en La Bisbal. Fuente: Twitter

 

Conociéndote, no tuvo que ser fácil.

¡No me retiro nunca! De hecho, esta es la segunda vez que me retiraba de un partido, la otra fue en 2021, en el 25K de Palma del Río, porque tenía 39º de fiebre… pero aún así lo intenté y entré a pista.

¿Sufriste por no llegar París?

Me dijeron que si llegaba sería en un estado físico muy justo para competir, así que mi objetivo era centrarme en la recuperación y hacer todo bien para llegar a eso. Obviamente, los torneos previos a Roland Garros los íbamos tachando porque seguía sin encontrarme del todo bien, hasta que dos semanas antes de París empecé a notar una mejora grande en el tobillo, me movía mucho más, notaba que la cosa iba bien. De no haber visto esa evolución, no hubiera jugado.

Al final llegaste a tiempo para la Qualy, ¿forzaste?

Roland Garros era el objetivo, me hacía mucha ilusión, pero nunca hubiese ido a ningún torneo si no veo el pie en condiciones, no podía correr el riesgo de tener una recaída de tres meses por hacer el tonto. Claro que me tiraba más por el hecho de ser Roland Garros, pero si fui es porque sabía que el pie estaba bien.

Al terminar ese partido, ¿cómo te viste?

Al 30% […] Piensa que no llevaba ni una semana jugando puntos. La preparación para la competición no fue la ideal, pero tampoco podía hacer otra cosa, estaba muy centrada en la recuperación del tobillo.

¿Y ahora?

A día de hoy, siendo realista, no sé si me veo al 100% de ritmo de competición. Eso lo vas cogiendo poco a poco, pero esto te pasa incluso cuando no te lesionas, etapas donde no te ves tan competitiva como siempre. Necesitas jugar muchos partidos, sacar adelante situaciones complicados para ir recuperando esa confianza.

Marina Bassols durante un partido. Fuente: Getty

 

¿Sientes miedo al competir?

No, no. En el partido de Roland Garros ya me hicieron muchas dejadas y fui sin problema. Yo sé que estoy bien del pie, sé que no voy a recaer porque está curado. He tenido un seguimiento continuado de la zona y las últimas noticias siempre han sido positivas, así que no tengo miedo de hacerme daño. Claro que puedo volver a hacerme daño, pero no porque no esté sanado. Si cuando compito estuviera pensando en el pie, no podría dar un paso. Este deporte es muy exigente, te hacen ir de lado a lado, todas saben que te has lesionado del tobillo, pero todo el mundo quiere ganar.

Te pilló justo en la época que más cerca estabas de pisar el top100.

Fue muy duro, sabía que la vuelta sería complicada, porque además yo tengo un juego de tener mucho ritmo y ser sólida, de apretar constantemente, como una mosca cojonera (risas). Al principio me costó, pero tampoco le doy más vueltas. Sé que el año pasado sumé ciertos puntos y que la semana que viene perderé los de este torneo… a no ser que lo gane. Tengo asumido desde hace años que la presión del ranking siempre está ahí, todo depende cómo lo enfoques.

¿Le das muchas vueltas?

Lo llevo bien, no me importa tener que defender muchos puntos esta semana, solo me centro en mi trabajo. Mi carrera me ha demostrado que el premio llega cuando menos te lo esperas, pero siempre con trabajo y la actitud correcta. Hay que estar positiva, no me preocupan los puntos.

¿Os marcáis objetivos dentro del equipo?

Entrar al top100 hace mucha ilusión, claro que piensas en dar ese paso, pero no me preocupan los objetivos de ranking, no lo voy mirando. La gente a veces me envía pantallazos del Live-Ranking cuando voy subiendo, pero no me centro en eso. Me encanta que me sigan y me apoyen, aunque esto solo pasa cuando las cosas van bien. Obviamente tenemos objetivos, luchamos para conseguirlos, pero nunca hemos tenido una conversación donde digamos: ‘De aquí a octubre tenemos que llegar a tal ranking’.

¿Qué habilidad destacarías de las top100 con las que has jugado?

Cada una tiene sus virtudes y sus defectos, diría que es un poco el conjunto global. Hay algunas que sin una gran actitud ya te hacen daño con su servicio. Otras que sin mucho saque cuentan con un gran físico para correr por toda la pista. Algunas solo tienen tiros pero le ponen mucha actitud. Por eso el nivel es tan parejo, porque ninguna es igual a otra. En mi caso, el salto que más me costó fue del top300 al top200. Ahora estoy persiguiendo el top100 para entrar a los cuadros finales de los Grand Slam, para mí es una motivación por el hecho de ganar más dinero y tener la opción de invertir más en tu equipo. Estas cosas también se notan en pista cuando juegas, el tema de la tranquilidad. Lo que sí reúnen todas las chicas del top100 es que son muy competitivas.

Marina Bassols celebrando una victoria. Fuente: Getty

 

¿Qué me dices de Jasmine Paolini?

Es súper eléctrica, tiene un juego de pies brutal, es otra mosca cajonera que llega a todo (risas). Igual una persona de 1’80m no tiene esa movilidad, cada jugadora tiene sus armas y las de Paolini son estas. Eso no quiere decir que sea mejor o peor, a mí me encanta cómo juega Paolini, además comparto todo lo que dice sobre la altura (risas).

¿Te han preguntado muchas veces sobre ese tema?

Sí, pero yo estoy contenta, quizá con más altura no tendría otras virtudes. Cada una tiene que descubrir sus armas y explotarlas, el tenis se basa en eso.

¿Y de Swiatek qué podemos decir?

Si de Paolini decíamos que era eléctrica de piernas, lo de Swiatek ya es otro nivel. Me quedé alucinada cuando coincidí con ella en la United Cup, ¡qué barbaridad de juego e intensidad! Lo tiene todo, me quedé mirando todo su entrenamiento, su rapidez es increíble, aunque lo mejor es su mentalidad. Me fijo mucho en ella, es la Nº1, me encanta.

Es demasiado superior a las demás, ¿esto es bueno o malo para el circuito?

Habla muy bien de ella, las demás hacemos lo que está en nuestra mano, pero todas damos nuestro 100%. En chicos con Carlitos pasa lo mismo, es increíble lo que hace, aunque sufrió un poco más. Iga también sufre, aunque gane la mayoría de sus torneos, pero se ve que también tiene días malos y aprende de ellos. No hay duda de que es buenísima, aprendo mucho viéndola jugar, es muy positivo tenerla de referente para las demás.

Marina Bassols en Valencia. Fuente: Twitter

 

Imagino que estarás encantada de volver a Valencia.

Me la conozco muy bien, aunque de momento no he podido salir a visitar la ciudad, así que espero estar muchos días por aquí para tener esa oportunidad. Se me da bien, eso es verdad, esperemos que esta vez me vayan igual las cosas.

Si te fuera muy, muy bien… ¿harías una locura?

Si gano el torneo me corto el pelo.

(Risas)

Que sí, que sí. Hasta los hombros.

No te quiero meter en un lío.

Mejor cortármelo que teñírmelo. ¿Tú me ves con el pelo rosa?

Lo dejo en tus manos.

Si gano me lo corto, dos palmos. Prometido.