Juan Pablo Varillas quiere seguir haciendo historia en el circuito para su país. El peruano de 27 años empezaba el año fuera del top 100, en el número 105 del mundo. En apenas un mes, Varillas ya rompía esa barrera, para luego, en febrero, estar entre los 80 primeros del ranking ATP.
El pasado mes de febrero, Juan Pablo Varillas vivió una semana especial en Buenos Aires. El peruano daba un salto importante dentro del Top 100 como consecuencia de firmar su primera semifinal en el circuito tras ganar, entre otros, a Dominic Thiem: “Creo que esa victoria y esa semana fue un punto de inflexión para mí. Me di cuenta de que era capaz de estar a ese nivel y competir ahí, que podía hacerlo durante varios partidos seguidos”, explica Varillas a la página oficial de la ATP.
Esa buena racha no quedó ahí. El peruano hacía historia en Roland Garros abriéndose paso en la cuarta ronda del torneo parisino: “Era el primer Grand Slam en el que entraba directo al cuadro principal, mi primera victoria en un cuadro principal. Tenía muchos objetivos y sueños por hacer realidad esa semana. Cada partido era importante también para mi confianza”, recuerda el peruano. A finales de junio, Varillas alcanzaba su mejor clasificación hasta el momento, el puesto número 60. Estando ahora el 67, Juan Pablo quiere continuar por el buen camino.
CONOCIDO EN CASA EN UNA TEMPORADA DE EVOLUCIÓN
“Quizá hace unos 10 meses casi nadie me conocía y yo estaba bien con eso. Me gusta ser un chico normal, pero ahora ha cambiado”, explica Juan Pablo, a quien le piden autógrafos ahora en su país. “Ha sido una gran temporada, llena de progreso, de creer en mí mismo y en lo que puedo hacer en pista”, explica Varillas, quien se enfrenta ahora de nuevo a Dominic Thiem en su debut en el ATP Astaná 2023.