
Alexander Zverev puso fin a la temporada 2020, la extrañísima y agridulce temporada 2020 con una derrota ante Novak Djokovic en estas ATP Finals que le ha impedido luchar por el torneo que ya ganó en 2018. El alemán reconoció el alto nivel del número 1 del mundo, afirmó que no tiene ningún problema en el trato con los jugadores a raíz de los últimos y supuestos acontecimientos de malos tratos y terminó refiriéndose al hecho que le ha dominado y rodeado en las últimas semanas.
La clave del partido: el servicio de Novak.
"Novak sirvió increíblemente bien, creo. Tuve que retroceder mucho para devolverle el servicio. Fue muy difícil para mí. Creo que empecé a jugar realmente bien en el segundo set, así que sólo algunos puntos decidieron el set. Todo el crédito para él. Está haciendo un trabajo increíble. Creo que las dos semifinales de mañana van a ser muy interesantes y no veo ningún favorito, para ser honesto."
Su relación con los jugadores tras las acusaciones de maltrato.
"¿Otros jugadores? Todos están bien conmigo. La relación entre los jugadores y yo no cambiará. Los jugadores saben lo que está pasando. Simplemente le deseé buena suerte a Novak en el resto de los partidos. Nada más."
Su resumen y análisis de una temporada buena pero con sinsabores.
"Sí, fue un gran año. Desafortunadamente, perdí muchos partidos importantes: semifinales en Australia, que podría haber ganado, la final del US Open, que debería haber ganado. Final en Bercy. Este partido. Así que hubo muchos partidos y muchos momentos difíciles, pero fue un buen año para mí. El partido del US Open obviamente todavía duele, pero es genial que vuelva a jugar a este nivel. Si fuera un año normal, creo que estaría mucho más arriba en la clasificación de lo que estoy ahora. Aún así, fue un buen año y hay mucho sobre lo que construir para el próximo año."
Sascha finalizó la rueda de prensa volviendo a defenderse de las acusaciones de Olya Sharypova.
"¿Qué más puedo decir? He dicho todo lo que he podido. Es muy triste que este tipo de acusaciones falsas puedan causar tanto daño y que se desvíe la atención del deporte hacia ellas lamentablemente, pero es el mundo en el que vivimos ahora mismo. No hay nada más que pueda hacer."