Grigor Dimitrov sigue avanzando en el US Open después de derrotar a Andy Murray en segunda ronda y tendrá el desafío por delante de verse las caras con Alexander Zverev. En rueda de prensa, el búlgaro reflexionó sobre su estado físico, confesando que se ve más fuerte ahora que cuando era más joven. Además, puso de manifiesto la importancia de las dejadas en su juego.
Muy completo físicamente
“Estoy mejor ahora que antes. Con 32 años estoy levantando más peso. Me siento más fuerte que hace cuatro o cinco años. También tengo mejores resultados en el gimnasio. Eso me da mucha confianza y creo que he experimentado semanas bastante buenas este año en muchos niveles. No pienso demasiado en nada de eso en este momento. Simplemente hago lo que tengo que hacer, ya sea en la pista o en el gimnasio”, comentó Dimitrov en el US Open.
La edad no es un problema
“Creo que incluso ahora en esta etapa de mi carrera aprecio más cada día que me despierto y siento que el cuerpo está genial. Por supuesto que tienes algunos dolores aquí y allá, es una parte inevitable, pero al mismo tiempo estoy tratando de tomar las cosas con mucha naturalidad. Nunca nada es tan bueno y nada es tan malo. Supongo que se le puede llamar un poco madurez, no lo sé”.
La dejada, un arma segura
“Creo que, si tienes el momento adecuado para hacer una dejada, casi se convierte en un tiro fácil de acertar. Pero debes seguir muy bien el juego para poder utilizar ese tiro en particular. Has jugadores que lo utilizan por desesperación, otros que lo aprovechan para cambiar el ritmo. También jugadores que lo utilizan para conseguir un punto gratis para para llegar a la red.
Para mí, especialmente en mi lado de revés, siento que, debido a que juego bastante corte, es más fácil para mí hacer la dejada en un momento muy diferente a lo largo del partido. Así que no sabes si será un slice en la línea o una cruzada o una dejada. Eso también pone a mis oponentes en una posición muy incómoda a veces al dudar de ellos o si cambio mi agarre demasiado pronto”.
Sobre Alexander Zverev
“Es un jugador increíble. Jugamos bastantes partidos y las últimas veces que nos enfrentamos sacó lo mejor de mí. Pero claro, es otro partido. No voy a abordar este combate como cualquier otro combate excepcional. Es sólo otra carrera para mí. Aprecio el desafío de cada jugador contra el que juego y creo que cada uno tiene cualidades muy diferentes”.
Roger tiene gracia, Rafa es el torero. ¿Y él? ¿El agraciado o el atlético?
“Eso lo resume todo, veremos qué tienen que decir los demás”, bromeó.