Alexandre Muller y una impresionante historia de superación

La vida de Alexandre Muller sufrió un shock hace años al sufrir síntomas graves de una enfermedad digestiva. A pesar de ser diagnosticado con la enfermedad de Crohn, quien será primer rival de Novak Djokovic en el US Open 2023, logró reengancharse al tenis profesional y sobrellevar el problema con un tratamiento, para ser uno más del top-100.

Superar escollos es parte de la vida, luchar contra graves imprevistos y perseguir tus sueños con insistencia. Alexandre Muller es un experto en ello, después de haber tenido que sufrir mucho más de lo habitual para poder llegar a erigirse en tenis profesional. El hombre que será el primer contrincante de Novak Djokovic en este US Open 2023 ha querido compartir su particular historia en unas palabras recogidas por atptour.com, en las que desvela la odisea que tuvo que pasar hace años cuando fue diagnostado con la enfermedad de Crohn, y cómo el tenis le impulsó a salir de ese atolladero y seguir luchando por hacer realidad sus sueños.

A sus 26 años, este jugador francés de 1,83m de estatura, buena movilidad y gran habilidad de mano, se encuentra en el mejor momento de su carrera, habiendo sido capaz de romper la barrera del top-100 y jugando ya cuadros finales de Grand Slam. Sin embargo, hace 12 años nada hacía presagiar que podría alcanzar estas cotas de éxito. "Cuando tenía 14 años empecé a sentirme mal y fui varias veces al médico. Me daban algunas cosas que me aliviaban temporalmente, pero un año después, me encontraba muchísimo peor. Tenía una inflamación enorme en el sistema digestivo. No retenía lo que comía y perdí 10 kilos. Un fin de semana, fui a visitar a mis padres y me oyeron ir al baño como 50 veces en una noche. Vieron que no podía seguir así y me llevaron al hospital. Después de muchas pruebas, ahí es cuando me dijeron que tenía la enfermedad de Crohn", advierte el galo.

Muller se pone una inyección cada dos semanas para sobrellevar la enfermedad

Es ésta una enfermedad crónica que genera inflamación e irritación en el sistema digestivo, afectando, sobre todo, al intestino delgado y al grueso. Desde pequeño había desprendido un enorme talento tenístico, que le llevó a entrenar en un club de Aix-en-Provence, después de que su padre se diera cuenta de que él no podía ayudarle más. Fue su progenitor el que contagió la pasión por el tenis a su hijo, al construir una pista en las inmediaciones de su casa. Una vez fue diagnosticado, los médicos exigieron a Alexandre que dejara de hacer deporte durante un tiempo, porque iba a tener que recibir un tratamiento de cortisona para paliar sus dolencias, antes de valorar qué tratamiento fijo le ponían para controlar la enfermedad. "Fue devastador parar por completo mi actividad tenística en un momento como ése, tan importante a la hora de intentar convertirte en profesional. Ahora necesito ponerme una inyección una vez cada dos semanas, y así será el resto de mi vida", declaró.

Cuestionado por su carrera y el duelo ante Novak Djokovic en primera ronda del US Open 2023, el jugador galo tiene claro qué debe hacer. "Competir ante el que es el mejor tenista de todos los tiempos, en mi opinión, es un auténtico privilegio y debo intentar divertirme en la pista porque no sé si experimentaré algo similar alguna otra vez en mi vida. Soy muy competitivo y cada vez que consigo un objetivo quiero algo más. Ahora pongo mi foco en llegar a ser top-50. Sé que no tengo opciones de ganar a Novak si él juega cerca de su nivel, pero voy a dar lo mejor de mí mismo", afirmó un Alexandre Muller consciente de que puede inspirar a mucha gente que haya sido diagnosticada con la enfermedad de Crohn. "Les diría que confíen en todo lo que pueden hacer a pesar de tener la enfermedad, y en que disfruten de cada momento de la vida". Palabra de un campeón, no ya del tenis, sino de la vida.