Jie Zheng: la otra muralla china

Jie Zheng (5 de julio de 1983), o, 郑洁, como prefieran, es la segunda mejor tenista de China tras la super mediática Na Li, pocos conocen a esta tenista tranquila, honesta y risueña, campeona doble de Grand Slam en dobles, doble semifinalista individual de Grand Slam, bronce de dobles en Beijing 2008 y que alcanzó el top15 de la WTA.

Jie Zheng, con una ya larga carrera y de notable éxito no es de las tenistas más conocidas por el circuito ni por los espectadores. "Hay muchas personas que leen libros en China, pero muy pocas que sean héroes nacionales" se atrevió a decir su entrenador cuando sus padres decidieron que Jie Zheng jamás alcanzaría estatura suficiente como para seguir su carrera en el tenis profesional, y que lo correcto era centrarse en sus estudios dejando a un lado esa capricho del tenis. Finalmente aquélla decisión cambió de parecer y a la que llamaban 'miniJie' en casa, nos dejó partidos para la historia del tenis femenino e hitos que le convierten en una de las tenistas chinas más célebres de la historia, como su medalla de bronce en dobles femenino en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 o como sus semifinales de Open de Australia 2010 y Wimbledon 2008.

Hoy número 22 de la WTA, alcanzó en su día el puesto 15 (18 de mayo de 2009), y #23 en dobles, llegó como tope máximo al número 3 (10 de julio de 2006). Su muñeca y su capacidad para correr y defender todo lo defendible soltando el brazo, es increíble. Por momentos su tenis puede parecer que no tenga nada especial, si no tiene el día desde luego podría pasar por ser una top100 sin un golpe destacable; pero cuando las piernas, la muñeca, la cabeza y el revés le funcionan es capaz de rayar a un nivel de top10. Así ha quedado patente en su carrera, y así se ha visto en sus partidos. Sin ir más lejos, en el último Wimbledon supo exprimir a la mejor versión de Serena Williams hasta acabar cayendo 6/7(5) 6/2 9/7 o también dan fe de esta 'calité' sus 10 victorias ante top10 a lo largo de estos años (entre ellas tres victorias sobre la en ese momento concreto número 1: una vez ante Safina y dos ante Ivanovic).

Graduada en la Universidad Deportiva de Sichuan, alcanzó quizás el momento algido de su carrera cuando accedió contra todo pronóstico a las semifinales de Wimbledon 2008 llegando como 133 del mundo. Su idilio con el Grand Slam británico sobrepasa los límites, su tenis sobre hierba se crece y sobre la hierba del All England Tennis Club más aún. De los 7 Wimbledone's que ha disputado, en tres de ellos le ha tenido que parar los pies la reina de ese jardín Serena Williams, en otra Petra Kvitova y en otra Kim Clijsters. En resumen, una tenista de las que en Wimbledon se suman al calor especial del torneo y brillan como en ningún sitio. En aquél Wimbledon de 2008, tras un año parada por una lesión fue capaz de derrotar a: Dominika Cibulkova (#30 cabeza de serie), Elena Baltacha (tenista local), Ana Ivanovic (#1 y reciente campeona de Roland Garros), Agnes Szavay (#15) y Nicole Vaidisova (#18), antes de caer en semifinales ante Serena Williams 6/2 7/6(5). Llegó allí como 133 de la WTA y salió como 16; además donó todo lo ganado en ese torneo a las víctimas del doloroso terremoto que había arrasado su ciudad natal pocos días antes en Chengdu. Mágica y loable la imagen de Jie colaborando en lo que hiciera falta y manchándose las manos quitando escombros días después de ser protagonista en la Central Court londinense; cuando pudo volver a casa una segunda vez tras la gira americana llevó centenares de raquetas y de pelotas para que los niños de Chengdu tuviera la oportunidad de jugar al tenis y de olvidar. Era la primera tenista china en alcanzar tamaña ronda en un 'major'. Tras aquello se convirtió en una de las tenistas embajadoras de la UNESCO, junto a Venus Williams y Tatiana Golovin. No faltaron razones, estamos ante una de las mejores embajadoras mundiales del tenis, por compatamiento ejemplar, por pasión por este deporte y por sencillez.

La carrera de Zheng ha sido intensa. Tras donar su dinero de Wimbledon 2008, la Federación China de Tenis le catisgó porque ese dinero no era suyo, sino del sistema nacional de competición de alto nivel. Finalmente Jie recaudó para costear lo donado por el terremoto y en 2009 se separó del sistema que le imponía su Federación. Empezó a entrenar con su marido, al que conoció porque se dedicaba a ser representante de Yonex, y quiso convencer a Jie para que firmara por ellos; luego surgió el amor y ya se imaginan el resto. Empezó a jugar al tenis tras ver un Seles vs Graf, y ver cómo su hermana mayor se apuntaba a la actividad; le gustó tanto que no pudo reprimir la sensación de necesitar jugar hasta que cogió una raqueta, desde entonces no paró; en su país le habría sido más fácil intentarlo con el badminton o el tenis de mesa, pero ella era tenista y no había quien le separara de la raqueta ni le quitara la idea de jugar los Grand Slam de la cabeza.

Desde que en 2003 diera el gran salto e ingresara en el Club de las 100 mejores tenistas del mundo, Zheng siguió escalando y no se salió de ahí hasta el año 2007 en el que las lesiones le pasaron factura. Desde entonces, 2008 y 2010 los cerró en el top30, 2009 en el top40 y 2011 en el top50. Empezó el 2012 en el lugar #48, y se llevó su cuarto título individual profesional en la primera semana del calendario ganando Auckland. Sin embargo su temporada ha rozado cierta normalidad, excepto su gran minigira de hierba. El potencial de Jie es verdaderamente increíble, y permanece oculto en un segundo papel que no le corresponde.

En China le ocurre algo similar a lo que deben sentir en España tenistas como Almagro, Verdasco o Feliciano. Son enormes tenistas con buenos logros, pero que permanecen a la sombra de una figura mucho mayor. Jie Zheng es la segunda gran muralla de China, y es de lejos una de las mejores tenistas chinas de la historia y marcará una época junto a Na Li. Hoy en Punto de Break les hemos querido contar su particular historia.