Eso es lo que se suele decir y, en el caso del tenis femenino español parece que se cumple la máxima. Tras saber hace unas semanas que la gallega Lourdes Domínguez no continuaría más en las pistas en 2017, esta semana ha sido el turno de dos compañeras de generación. La catalana Laura Pous-Tió (32 años) ha disputado su último partido como profesional en el Campeonato de España. Laura se marcha con un bagaje de 20 títulos ITF, las finales del WTA de Fez (2012), así como un mejor ranking personal de 72 (2012). Por su parte, pendiente todavía de confirmación oficial, la valenciana Arantxa Parra (34 años) parece que también se retirará y asumirá el puesto de coordinadora de los equipos de Copa Davis y Copa Federación. Arantxa se marcharía con un bagaje de 11 títulos ITF individuales, un mejor ranking de 46 (2010) y una excelente carrera en dobles, con múltiples títulos con Anabel Medina y Nuria Llagostera. En la foto, acompaña a las tres mosqueteras otra española semi-retirada, Maria José Martínez que todavía continúa dando guerra ocasionalmente en el circuito de dobles.