
A Novak Djokovic le pillaron con la guardia baja en su última rueda de prensa para preguntarle por asuntos ajenos a sus partidos y su torneo. Concretamente, le preguntaron por Nick Kyrgios, un hombre que ha jugado un partido en sus dos últimas temporadas. A sus 29 años, el futuro del australiano es toda una incógnita, aunque ahí saltó el serbio para despejar las dudas sobre lo que podría pasar este verano.
"Entrenamos hace unos días y dio muy buen nivel con el servicio. Me dijo que podría volver en el US Open, pero no sé si estaba bromeando, aunque le vi golpeando la pelota tan bien como siempre. Tiene mucho talento, es muy bueno, me dijo que la muñeca le molesta especialmente con el servicio, pero está aumentando las cargas, la intensidad y la velocidad. Está cerca del objetivo, lo cual es positivo verlo lleno de vida y energía. No sabrá cómo reacciona su muñeca hasta que juegue un torneo, así que espero que vuelva pronto, el circuito lo necesita”, comentó el de Belgrado.