Camila Giorgi sorprendió al mundo anunciando su retirada de un día para otro y sin ningún tipo de comunicación oficial de por medio. Desde ese momento, han ido saliendo informaciones que amplía y especifica ahora Corriere dello Sport, presentando un caso de película. Y es que Camila y su padre se escaparon sin pagar ni un euro de una villa en la que se alojaron durante seis meses, hurtando objetos de antiguos de gran valor sentimental y económico (unos 100.000 euros) al dueño de la misma. Esto se une a la posibilidad de que tenga una deuda muy alta con el Estado italiano.