Han pasado ya varios meses desde que Danielle Collins anunciara que 2024 sería su última temporada como profesional, un bombazo que más de uno todavía no ha podido digerir. La estadounidense, en uno de los momentos más dulce de su carrera, sigue respondiendo a las mismas preguntas a cada torneo que pasa, encontrándose con gente que no comparte su decisión, como si importara la opinión de los demás. En una entrevista con Tennis.com podemos leer a la estadounidense divagar acerca de este asunto que la lleva persiguiendo varias giras, aunque también le ha sentado fenomenal a la hora de competir.
“Creo que la sociedad, incluso las personas que me acompañan y me siguen en el circuito, han tenido dificultades para aceptar el hecho de mi retirada, lo cual me parece bastante extraño. Voy a cumplir 31 años a finales de esta temporada, lo cierto es que suele ser la edad habitual en la que muchas personas deciden dar este paso, así que muchas veces pienso: ¡Dadme un respiro! Ojalá me dejen retirarme y tener una familia en paz”, señala con algo de cansancio la norteamericana.
“Es como si algunas personas no quisieran reconocer que he llevado a cabo grandes mejoras en los últimos tiempos, es casi como si no te dieran crédito en el momento en el que les confiesas que en estos momentos no te importa lo mismo que a ellos. El contraargumento para que rectifique es que podría acudir a estos últimos torneos sabiendo que es mi última oportunidad para hacerlo bien allí y que, por lo tanto, podría sentir presión y ansiedad. Obviamente, no está siendo el caso”, reconoce con la sonrisa de quien está orgullosa de su temporada.
El ‘asunto Collins’ es tan fácil de entender que a veces resulta extraño ver cómo hay gente que no lo entiende. Su vida, su carrera, sus decisiones. No hay más, por mucho que desde fuera pueda doler el hecho de perder a uno de los grandes atractivos del circuito. “Las personas que nos apoyan, los aficionados, nos ven únicamente como jugadores de tenis, no como personas”, afirma la de Florida. “La manera en la que ha ido evolucionando mi personalidad con el paso de los años me ha ayudado a convertirme en alguien bastante relajada, así que no siento que me definan mis resultados sobre la pista o mis éxitos como deportista”, sostiene.
CUENTAS PENDIENTES
Y una vez llegue noviembre, dispute su último torneo y finalice su trayectoria profesional, ¿qué será lo siguiente? Tranquilos que a Collins no le faltan planes. “Siempre me ha gustado mucho correr, es algo que no he podido hacer tanto durante mi carrera porque mi entrenamiento no suele incluir demasiadas carreras de larga distancia. Ahora, sin embargo, estoy entrenando para una maratón a finales de año, no estoy segura todavía de qué maratón correré, pero espero que en noviembre-diciembre, cuando termine la temporada, tenga un par de meses para centrarme únicamente en eso”, anticipa la actual Nº15 mundial, campeona este año en Miami y Charleston.
Aparte del ocio, en su mente también habita un proyecto mucho más ambicioso relacionado con la salud y la ayuda a personas que están pasando por situaciones que Danielle conoce perfectamente. “Hay muchos lugares en el mundo con personas que se enfrentan a problemas de salud de las mujeres, pero muchas de ellas no tienen los medios mantenerse económicamente a través de estos desafíos. Me gustaría ayudarlas, brindar ese apoyo financiero a aquellos que se han enfrentado a adversidades similares a las mías, estar allí para las mujeres que están luchando. En algún momento de este verano lanzaremos la Fundación y se centrará en la salud y la equidad de la mujer”, concluye.