
Daniil Medvedev quiere buscar su segundo título sobre tierra en el Masters 1000 de Montecarlo en una superficie que alguna vez confesó “odiar”. Sin embargo, este año encara la gira de tierra de manera diferente, con ganas de seguir mejorando y con la motivación de haber progresado bien en las últimas semanas. ¿Cómo se encuentra ahora mismo su conexión con la arcilla?
La compleja relación entre Daniil Medvedev y la tierra batida es bien conocida por todos y ahora en la gira europea sobre esta superficie volveremos a ser testigos de sus roces. Y es que el ruso se define como un experto en pistas duras, lo que le aleja todavía más de una arcilla en la que debe adaptarse para sobrevivir. El Masters 1000 de Montecarlo ya ha arrancado, así que Medvedev necesitará reducir ese abismo que les separa para convencerse de que puede llegar a firmar más que buenos resultados allí como ya hizo el año pasado con aquel título en Roma. Para empezar, el número 4 del mundo confesó a los medios que este año se lo está tomando con otra filosofía, además de estar planteándose cambiar su posición al restar, ya que habitualmente lo hace desde muy atrás.
- Sobre restar desde el fondo de la pista y adaptarse a la tierra
“Hace cinco años cambiaba regularmente mi posición al restar, mientras que ahora soy un poco más conservador en cuanto a estar atrás porque puedo ganar muchos partidos y muchos torneos estando en esa posición. También me da un poco de miedo decirme a mí mismo en un momento del partido: ‘¿me pongo más adelante?' Luego, si pierdo un partido estaré en el vestuario pensando en que debería haberme quedado atrás. Es algo que también estoy intentando cambiar este año, ser un poco más impredecible e intentar trabajar más la posición delante, donde quizás a veces no soy tan bueno como desde atrás.
En tierra es un poco más importante porque los jugadores sacan diferente. El servicio adquiere más efecto en el rebote, o a veces como la pista, por ejemplo, aquí en Montecarlo, no es demasiado grande, no puedes estar tan lejos, tan atrás. Algunos jugadores si realizan un buen servicio con kick, hay que estar delante, algo que pasa en la arcilla. Voy a intentar ver qué tal y cuál es la mejor solución. Ojalá me podáis ver más adelantado y jugando bien porque si me veis más adelante jugando mal, entonces volveré atrás”.
- ¿Continúa con su odio hacia la tierra batida?
“Hace dos o tres años siempre era lo mismo antes de la temporada de tierra. Me decía: ‘está bien, vamos a motivarnos y a emocionarnos’, pero luego llega la tierra y estaba un poco deprimido durante un par de días y luego trataba de manejarlo. Este año es como: ‘está bien, es un cambio de superficie, seguro que necesitas adaptar tu juego y adaptar tu mentalidad en algunos golpes’. Estoy intentando hacerlo lo mejor que puedo y tengo muchas ganas de que llegue el torneo. Así que hasta ahora ha sido muy tranquilo y ¿un buen proceso de trabajo? Estoy deseándolo. En el partido todo puede cambiar para bien o para mal, así que veamos cómo va”.