La número 1 del mundo no estará en la gran final del WTA de Dubái. Iga Swiatek se queda fuera del torneo después de que una gran Kalinskaya la superara en sets corridos por 6-4 6-4. Iga se queda sin luchar por uno de los títulos que todavía no tiene en su palmarés y el torneo tendrá una final entre la 40 y la 26 del mundo.
Iga Swiatek veía el horizonte muy despejado para conseguir un nuevo WTA 1000 en el torneo de Dubái. Las máximas favoritas al título ya habían caído o se habían retirado. Aryna Sabalenka, Elena Rybakina o Coco Gauff estaban fuera de un camino, a priori, muy favorable. Sin embargo, la polaca se cruzó con una jugadora sin nada que perder: Anna Kalinskaya. La rusa se impuso por 6-4 6-4 en casi dos horas de encuentro. No se vio la confianza a la que nos tiene acostumbrados la polaca, sino que parecía que Kalinskaya se la había robado. La rusa jugará su primera final de WTA 1000 ante Jasmine Paolini después de eliminar también a Ostapenko y a Gauff, una final para nada en las quinielas de los aficionados.
El primer set empezó con problemas para la número 1 del mundo, teniendo que afrontar sus dos primeras bolas de break en contra. El encuentro emepzó comenzó siendo muy igualado, con muchas oportunidades para ambas de hacerse daño. Y es que los juegos al servicio no fueron nada livianos para ninguna. Swiatek fue la primera en dar un golpe sobre su rival para ponerse por delante del marcador, pero la rusa reaccionó rápida y agresiva para hacerse hasta con 4 juegos consecutivos que le dieron el primer set en un encuentro que había empezado siendo muy igualado. Y es que la rusa hizo muy bien en atacar agresiva, sobre todo los segundos saques de la polaca, que no tuvo su mejor día al servicio.
Iga aprieta, pero no ahoga
La segunda manga no empezaría con buena cara para la número 1, que volvía a conceder su servicio por tercera vez seguida y a enfrentar el peor momento. Kalinskaya salvó 9 de los 11 puntos de break en contra, por lo que la polaca no acabó aprovechando sus oportunidades de cara al final del encuentro, cuando parecía que el rumbo podría dar un giro de tuercas importante y darse la oportunidad que tanto estaba buscando. De hecho, la rusa empezó a fallar con su servicio en las dos veces que tuvo en su mano sacar para llevarse el partido: los nervios le arrebataron esa confianza y libertad con la que estuvo jugando casi todo el partido. Swiatek fue valiente y hasta logró salvar 3 puntos de partido, pero su esfuerzo final no tuvo recompensa. Kalinskaya dio un golpe maestro para tumbar a la favorita y luchar por su primer WTA 1000 el próximo sábado. Y es que la rusa está teniendo una semana de enseuño partiendo de la clasificación hasta llegar a la gran final.