
Arabia Saudí está haciendo una enorme inversión por el deporte y parece que ya están estudiando cómo meterse de lleno en el tenis. Si hasta la fecha los grandes desembolsos los habían hecho en el golf, la F1 o el fútbol, el próximo destino es el tenis y ya están hablando con la ATP para ponerlo en marcha.
El país de Oriente Medio está muy interesado en crear una gran estructura en todos los deportes que son de su interés y como se ha podido ver en las disciplinas en las que han invertido hasta la fecha, van muy en serio y están dispuestos a invertir el dinero que sea necesario. Esto se puede ver perfectamente en fútbol, donde jugadores como Cristiano Ronaldo o Karim Benzema están cobrando más de 200 millones de euros por temporada, una cantidad imposible en cualquier otro país del mundo, pero prácticamente irrisoria para Arabia Saudí, ya que gran parte de ese dinero sale de las arcas públicas, en concreto del Fondo de Inversión Pública puesto en marcha por el Príncipe Mohamed bin Salmán.
Lo cerca que están del tenis lo hemos conocido a través de Andrea Guadenzi, presidente de la ATP. El italiano ha admitido haber tenido ya conversaciones con Arabia y cree que llegarán a buen puerto. "Hemos tenido una conversación positiva, pero es importante seguir respetando la historia del deporte y el producto, trabajando con las partes interesadas actuales en lugar de en contra. Tienes que preservar algo que es casi sagrado, las reglas del juego. Esto no es un videojuego, esto no es una película", comentó a una entrevista con el Financial Times.
Por el momento, esto es un proyecto a largo plazo, pero que ya ha puesto su primera piedra y Gaudenzi tiene claro que el dinero de Arabia podría favorecer el espectáculo y ofrecer más partidos entre los mejores, que, en su opinión, es lo que quieren ver todos los aficionados. "Si eres un aficionado al golf, quieres ver a los mejores jugadores jugando unos contra otros. Quieres una clasificación y quieres una historia simple", dijo sobre este asunto.
EN BUSQUEDA DE INVERSIÓN
Gaudenzi también tuvo tiempo para referirse al fondo CVC, que llegó a un acuerdo con la WTA, pero no lo hizo con ATP, algo que el italiano no tuvo problema en explicar los motivos por los que no salió. "La ATP no necesita efectivo y debe tener cuidado con la dilución, pero claro que hay posibilidades de trabajar con inversores externos. Hay muchas formas de convertirse en inversor del ecosistema. No se trata solo de crear una nueva gira o comprar un torneo", concluyó.
Cabe recordar que la ATP está intentando reducir la diferencia entre los Grand Slams (organizados por las federaciones) y el resto de torneos, que reparten menos dinero y menos puntos. Por ese motivo, Gaudenzi está buscando fondos interesados en invertir para así asegurar el crecimiento continuo de la organización. De hecho, los ingresos han experimentado un crecimiento significativo desde su punto más bajo en 2020, cuando alcanzaron los 93 millones de dólares debido al impacto negativo de la pandemia. En 2022, los ingresos brutos aumentaron a 250 millones de dólares, en comparación con los 176 millones del año anterior.
En línea con este crecimiento, el Tour ha aumentado considerablemente los premios en metálico para los jugadores, así como los fondos de bonificación. En 2023, la ATP ha destinado 218 millones de dólares para premios, en lo que es la mayor cifra de dinero de la historia y la vez que más cerca se sitúa de los premios de los Grand Slams, que también suben año tras año, aunque lógicamente esto podría cambiar si entra el dinero de Arabia, mucho más potente en lo económico que las federaciones de los cuatro Grand Slams.
Habrá que estar pendientes de cómo evoluciona todo esto, ya que todavía no hay nada firmado y parece que llevará un tiempo. No obstante, por lo visto hasta la fecha, Arabia Saudí suele ir muy en serio con sus inversiones y como ya se vio en la Diriyah Tennis Cup disputada en diciembre, el dinero no va a ser un problema para el país de Oriente Medio, que ya planea hacerse con el Mundial de fútbol de 2034 y quién sabe si buscará organizar otras competiciones.