Cecchinato: "No puedo estar recordando siempre lo que hice en 2018"

Charlamos en exclusiva con quien fuera semifinalista en París, que a sus 30 años, vuelve a sentir confianza y puede ser un tapado en Roland Garros 2023.

Diego Jiménez Rubio | 24 May 2023 | 21.22
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Marco Cecchinato, posible revelación en Roland Garros 2023. Foto: gettyimages
Marco Cecchinato, posible revelación en Roland Garros 2023. Foto: gettyimages

Hay casos que parecen escapar a la lógica en el mundo del tenis, historias difíciles de repetir y que ponen de manifiesto la magia de este impredecible deporte. Marco Cecchinato encarna uno de esos enigmas difíciles de descifrar, el de un jugador tremendamente talentoso y de juego preciosista con una irrupción meteórica y una resaca del éxito prolongada, víctimas de lesiones, fatiga mental y dificultad para asumir el nuevo rol. Un partido marcó para siempre su carrera, pero el italiano se afana por pasar página y mirar al futuro, deseoso de reconciliarse con un deporte que le ha dado demasiados disgustos después de haber acariciado la gloria. A sus 30 años y con un amplio bagaje de experiencias en la mochila, busca ser protagonistas en grandes citas y demostrar que lo que hizo en Roland Garros 2018 no fue un hecho aislado. Charla sobre todo esto con Puntodebreak y deja interesantes titulares.

Repasando su trayectoria, llama poderosamente la atención comprobar que Marco no ha sido capaz de ganar un partido de Grand Slam más allá de esas memorables semifinales en París hace cinco años, dejando por el camino a Carreño, Goffin y, por supuesto, Novak Djokovic, antes de ser derrotado por Thiem. Bendecido con el don del puro talento y una mano prodigiosa, el de Palermo se siente cómodo sobre el polvo de ladrillo, donde puede tejer una delicada de telaraña a base de cambios de altura, velocidad, efectos, inteligencia táctica y una habilidad innata para las dejadas.

Campeón en Umag y Budapest en 2018, y en Buenos Aires en 2019, todo lo que había construido, llegando a ser 16 del mundo, se desmoronó cual castillo de naipes en ese aciago 2019, en el que llegó a encadenar un parcial de 12 derrotas en 13 partidos. Pasó de terminar el 2018 en el puesto 20 del ranking, a hacerlo en el 71 en 2019. Las cosas están cambiado este año, tal y como él mismo reconoce. Lesiones, inconsistencia en los entrenamientos y dificultad para rendir con continuidad ante la evolución del tenis hacia velocidades superiores pueden explicar la deriva de un Cecchinato que entiende mucho mejor la profesión ahora, habiendo alcanzado un nivel de madurez con el que confía en recuperar su mejor nivel.

No tuvo una buena gira sudamericana, pero en Estoril todo cambió, y ha hecho una notable aproximación a Roland Garros 2023, donde será uno de los "cocos" de cara a las primeras rondas. Ha sido capaz de vencer a tenistas como Schwartzman, Fognini, Davidovich, Fucsovics, Bautista o Shelton, aunque luego le ha costado mantener este nivel y profundizar en los torneos como cabría esperar. Aún y así, se ha metido ya 73 del mundo y atesora la confianza necesaria como para ser una amenaza latente en París y, por qué no, soñar con repetir algo parecido a lo que ya consiguió hace un lustro.

Vienes en muy buena dinámica tras lo conseguido en Estoril, donde se te vio jugando a gran nivel de nuevo. ¿Qué objetivos te marcas después de haber visto que eres capaz de ganar a jugadores importantes?

Bueno, la verdad es que me sentí muy cómodo esa semana y pude conseguir las sensaciones que iba buscando desde hacía tiempo. Lo malo es que me lesioné un poco el abdominal y tuve que renunciar a competir en Montecarlo y Banja Luka. Eso hace que no sea nada sencillo recuperar el nivel, ahora mismo el circuito no espera y si dejas de entrenar durante unos días, todo se hace cuesta arriba. Pude pasar la fase previa en Madrid, ganando partidos duros, y la verdad es que es fundamental para mí competir con regularidad y adquirir ritmo y confianza.

Cada vez que te vemos encadenar buenos partidos y sumar victorias, resulta imposible no pensar en lo que hiciste en Roland Garros 2018. Esa victoria contra Djokovic y ese torneo en general, ¿ha sido más una fuente de motivación para ti al saber que eres capaz de conseguir algo tan grande, o una presión añadida al ver que te está costando recuperar ese nivel de juego y que todo el mundo te lo recordamos?

A ver, pasó mucho tiempo de eso. Realmente, después de ganar a Djokovic en París, fui campeón en dos torneos ATP, llegué a ser el 16 del mundo y todo lo que viví fue muy positivo. Pero ahora estoy en otra etapa, necesito jugar partidos y no puedo estar pensando continuamente en aquello porque puede terminar siendo un obstáculo.

En los últimos años, vemos cómo cada vez es más frecuente que jugadores que han cumplido ya los 30 años, llegan al mejor nivel de sus carreras deportivas. Querría saber cuáles son los factores que creen que influyen en ello y si piensas que puedes conseguirlo tú también.

Creo que la experiencia que te dan los años en el circuito es muy importante. Aprendes a manejar situaciones, a interpretar partidos, regular esfuerzos. Yo vengo de dos años muy complicados, luchando por no salir del top-100, teniendo que competir en eventos Challenger... Eso es difícil de aceptar cuando llevas tiempo compitiendo en los mejores torneos del mundo, pero ahora vuelvo a sentir la alegría de jugar a tenis y a verme con posibilidades de estar en grandes torneos. La clave es confiar en uno mismo pero, sobre todo, entrenar mucho. Tuve unos años en los que no entrené lo suficiente y eso te pasa mucha factura en un circuito tan exigente como el actual, repleto de jóvenes que le pegan duro a la pelota y que quieren ganar siempre. Si quieres estar en el top-50, que es lo que me gustaría, necesitas mantenerte a tope todo el año.