
Han sido días intensos, de emociones desbordantes y tenis de gran calidad en el Mutua Madrid Open 2022. Uno de los eventos más importantes de la gira sobre tierra batida ha dado lugar a momentos absolutamente inolvidables y que pueden ser percibidos como históricos en este deporte. Carlos Alcaraz ha batido numerosos récords y se ha ganado el corazón de los aficionados y el temor de sus rivales, erigiéndose en el jugador más en forma del momento. Ganar a Rafael Nadal y Novak Djokovic en días consecutivos es una hazaña memorable, completada con el título. Además, Ons Jabeur salió como campeona de la capital de España y dando sensaciones de grandeza de cara a Roland Garros 2022.
1. Carlos Alcaraz está en otra órbita del planeta tenis
Se agotan los calificativos para describir lo que está haciendo el joven murciano. Transmite sensaciones de grandeza como hacía mucho tiempo no se veían en alguien de su edad y hace que todo el juego parezca depender de él. Recursos infinitos, ambición inagotable y talento inabarcable.
2. Alexander Zverev recupera la confianza
Llegaba con serios problemas anímicos después de meses muy negativos, pero el germano ha sabido reencontrarse consigo mismo en uno de sus torneos predilectos, demostrando al mundo que sigue siendo un firme candidato a lo máximo allá donde vaya, y que puede llegar a París con confianza.
3. Rafael Nadal y Novak Djokovic dan pasos adelante muy importantes
El español se tomó este evento como el inicio de una andadura cuya meta está situada a tres semanas vista y fue capaz de ganar dos partidos, adquirir ritmo competitivo y luchar hasta el final ante Carlos. Toma de contacto positiva con la competición y punto de partida a partir del cual construir algo más ambicioso en Roma. Por su parte, el serbio demuestra estar ya en su nivel, o muy cerca de él, y solo pequeños detalles le privaron de vencer a Alcaraz.
4. Casper Ruud, Félix Auger-Aliassime y Andrey Rublev siguen faltos del paso final
Son tres de los hombres llamados a erigirse en alternativas al poder establecido, pero no transmiten la sensación de estar cerca de dar ese último salto que les permita vencer a uno de los grandes. Necesitan un resultado brillante en Roma para creer más en sus posibilidades.
5. Stefanos Tsitsipas reivindica su candidatura a la gloria
Las condiciones en Madrid no son las ideales para él, pero aún y así, ha sido capaz de meterse en semifinales y seguir en tendencia positiva. Llegará a Roma sin grandes deberes y con la sensación de que, en tierra batida y a nivel del mar, es un jugador difícilmente batible.
6. Ons Jabeur, una jugadora tan especial como necesaria
Talento a raudales, golpes especiales y una mano prodigiosa son los elementos que caracterizan a esta pionera jugadora tunecina, referente del mundo árabe a nivel deportivo. Jabeur fue una digna campeona y presentó sus credenciales a seguir creciendo y optando a lo máximo.
7. Las tres sorpresas positivas tienen algo en común
Jessica Pegula, Jil Teichmann y Sara Sorribes no son jugadoras con una vocación ofensiva clara, pero sí trabajadoras natas que saben amplificar sus virtudes y esconder sus defectos con una capacidad de trabajo y sacrificio espectaculares.
8. Nuevo retroceso de Naomi Osaka, Garbiñe Muguruza y Aryna Sabalenka
Lesiones, molestias, problemas de confianza, mala suerte... Las causas pueden ser muchas, pero hay demasiadas decepciones en tres mujeres que, por potencial, deberían encontrar cierta regularidad en su tenis, que les esquiva en lo que va de año.
9. Brotes verdes en el juego de Andreescu, Halep y Raducanu
La tendencia al alza de estas tres jugadoras, tremendamente carismáticas, es una de las mejores noticias para el tenis femenino, necesitado del resurgimiento de tres campenas de Grand Slam que llevan unos meses alejadas de su mejor nivel.
10. Paula Badosa y una lógica imposibilidad de rendir al máximo continuamente
No hay dramas. Perdió y lo hizo ante una tenista mejor que ella en ese momento. Paula ha de continuar trabajando, sin estridencias ni especiales decepciones, consciente de que no siempre se puede dar el máximo y que la mejor manera para recuperarse es trabajar duro y minimizar los efectos colaterales en lo moral de una derrota como la sufrida en Madrid.