¿Quién es Jenson Brooksby, el hombre más en forma de la temporada?
Dos títulos en tres finales y solo tres derrotas. Los mejores números del circuito ATP los tiene un estadounidense de 20 años que quiere dejar su huella.


Una de las cosas más maravillosas del tenis es que te da la oportunidad de conocer, en prácticamente cada rincón del mundo, a nuevos jugadores y jóvenes promesas a un ritmo vertiginoso. Prácticamente cada semana encontramos un nuevo talento surgido de una lejana factoría, y prácticamente cada semana se nos ofrece la posibilidad de apuntar un nuevo nombre que dentro de unos años aparecerá en los mejores torneos del mundo. Este 2021, un año especial por las circunstancias de la pandemia, ni tan siquiera las modificaciones en el ranking están evitando que las mayores estrellas del futuro progresen.
En el semillero global del deporte de la raqueta, una nueva planta empieza a florecer. Es bastante espigada, superando los 1,93 metros de altura, pero sus ramificaciones se extienden sin dar atisbos de debilidad. Jenson Brooksby (Sacramento, California, 26 de octubre del 2000) es el hombre más en forma de todo el circuito ATP. Olvídense de Tsitsipas, Rublev o Djokovic: su porcentaje de victorias en el circuito Challenger es descomunal (87,5%) y ya acumula dos títulos y una final. Empezó el año fuera del top-300 y ya está dentro de los 200 mejores del circuito. Y, claro, muchos se preguntarán: ¿de dónde ha salido este tipo?
Ayer, Brooksby conquistó su segundo Challenger del año en Orlando, batiendo sin dificultades en la final a todo un nombre establecido en el circuito ATP como el de Denis Kudla. El estadounidense se alzó con un título que tiene un valor añadido y que muestra su superioridad en este escalón: no cedió ni un solo set a lo largo de la semana, ejerciendo un dominio sobre el resto de tenistas muy impresionante. Hace varias semanas, Jenson también conquistó el Challenger de Potchefstroom, en Sudáfrica, además de llegar a la final en Cleveland, donde cayó ante Bjorn Fratangelo.
En solo tres meses de temporada, Brooksby ya ha jugado sobre tierra batida (estuvo disputando varios Futures en España a principio de año), sobre canchas duras al aire libre y sobre pistas cubiertas bastante más rápidas. Tras el título viajará hacia Tallahassee, donde le espera la tierra verde. Cuatro ecosistemas totalmente distintos que dicen mucho sobre su madurez, su versatilidad, sus ganas de aprender en todo tipo de situaciones y, sobre todo, un hambre voraz de adaptarse a cualquier condición para escalar en el ranking.
Pero debemos irnos más atrás. Mucho más. En 2019, Jenson Brooksby llegaba a Flushing Meadows con una invitación por haber conquistado los Campeonatos Nacionales Sub18 de la USTA. Su nombre, al lado de los mayores cracks en un escenario como la Gran Manzana. Cero experiencia a nivel ATP. ¿Miedo? Para nada. Jenson puso el último clavo en el ataúd de Tomas Berdych, a quien derrotó en primera ronda. Fue la última vez que vimos al checo en una pista de tenis y la primera que probablemente vimos el potencial del tenista de Sacramento.
Desde aquella primera victoria en un Grand Slam hasta este año ha llovido mucho. Brooksby ha tenido que afrontar todo tipo de obstáculos que han dado un vuelco a su vida. Por aquel entonces ya se había comprometido a comenzar su carrera universitaria con la Universidad de Baylor, tomando el camino del college en lugar de entrar de lleno en el profesionalismo. Sin embargo, una lesión grave en un dedo del pie le mantuvo apartado de las pistas. Cuando quiso volver, la pandemia apareció y las competiciones universitarias se suspendieron. Brooksby estuvo más de un año sin disputar un partido de tenis.
Cuando el mundo volvió a la normalidad, era el momento de aprovechar el tiempo perdido. Demasiado tarde para iniciar una carrera de cuatro años: ya le habían arrebatado uno y medio. El periplo de Brooksby con la Universidad de Baylor terminó sin apenas apariciones en pista: era momento de comenzar su carrera profesional. En solo cuatro meses viajando el circuito, con nuevos impedimentos que impiden una rápida escalada en el ranking, Brooksby ya es top-200, está sexto en la Carrera #NextGen a Milán y apunta a la fase previa de Roland Garros como otro escenario en el que dar un paso hacia delante.
¿Su juego? El propio Jenson se define en declaraciones a la ATP. "Creo que tengo un tenis bastante completo. Me gusta mucho dominar con mi revés, pero mi derecha también se acerca a ese nivel poco a poco. Peleo por cada punto y trato de mover a mi rival por toda la pista todo lo que pueda. No me gusta regalar nada". Detrás de estas palabras se esconde un espíritu competitivo indómito, pero los patrones que sigue Brooksby en pista son consecuencia de su biotipo como tenista.
Su altura y envergadura le proveen de una potencia que, sin embargo, entra en escena en el segundo golpe del intercambio. Su saque es bastante mejorable, pero Jenson se apoya en un gran golpe de continuación para que su juego funcione en pistas rápidas. A partir de ahí, su revés es su mejor arma: le corre una barbaridad y es capaz de tirar el paralelo con muchísima facilidad. Es en la agresión controlada donde se hace fuerte, si bien su movilidad, para la altura que tiene, no es nada desdeñable. Jenson no encaja en el típico molde estadounidense: recuerden que abrió su 2021 jugando Futures sobre tierra batida en España...
"En lo que estoy trabajando mucho últimamente es en ser mucho más potente y físico en los primeros golpes del intercambio, algo que en el pasado me costaba más. Lo importante es hacerlo en los entrenos para tener la confianza de que me salga en cada partido. Esta semana ha funcionado". Su receta para el éxito va acompañada, también, de una clara filosofía en la que mirar al futuro no sirve de nada. Los rankings no son más que una figura lejana, y no existe ningún tipo de presión cuando se ve sexto en la clasificación de los mejores jóvenes del año.
"La mentalidad de mi equipo y que yo comparto es que no miramos al ranking. No extraemos conclusiones de nada de eso. Lo importante es ir día a día y hacer todo lo que esté en mi mano para ser mejor. Los resultados hablarán por sí solos. Estoy muy feliz con mi año hasta el momento y con todo mi crecimiento, en especial después de un 2020 tan duro. Ahora me estoy centrando en las cosas que de verdad importan". Apunten su nombre, porque dentro de muy poco estará en la élite más absoluta del circuito. Jenson Brooksby viene fuerte... y no quiere parar.