Los partidos en Roland Garros entre Nadal y Djokovic

Carlos Navarro | 10 Oct 2020 | 20.36

Nadal y Djokovic tras las semis de 2013. Fuente: Getty

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Rafael Nadal y Novak Djokovic en Roland Garros. A 10 de septiembre de 2020, esta era la final soñada de muchos y un partido que podría tener consecuencias inexorables en la lucha para ser el mejor tenista masculino de la historia. Número uno del mundo contra número dos: el rey de la tierra contra su principal rival todos estos años sobre esta superficie. Y es que español y serbio han protagonizado varios partidos de vértigo sobre la arena parisina, dos gladiadores desenvainando sus espadas en duelos a vida o muerte. Muchos de ellos permanecen en la memoria colectiva, así que es momento de repasarlos uno por uno.

- 2006: Nadal d. Djokovic 6-4, 6-4 y retirada (QF): Novak Djokovic no se encontraba ni entre los 50 mejores del mundo cuando enfrentó por primera vez al Rey de la Tierra en su jardín particular. Nadal trataba de revalidar su corona en París, bien asentado en el ranking solo por detrás de Roger Federer, y un imberbe Novak estaría lejos de ser resistencia. El joven serbio luchó hasta que su cuerpo dijo basta, y una lesión en la parte baja de la espalda le obligó a retirarse en su primera gran actuación en un Grand Slam.

Lo más recordado de aquel duelo, quizás, fuese lo que ocurrió en la rueda de prensa posterior. Un derrotado Djokovic mostraba sus ambiciosos planes sin ningún tipo de pudor: "Al principio creo que él no se sintió tan cómodo, yo tuve el control del partido. No pude finalizar de forma correcta. Está claro que él es el mejor en esta superficie, pero no es imbatible. Creo que hoy podría haber ganado". Tiempo después, Nole demostró que la invencibilidad del manacorí en tierra batida se reduciría drásticamente al enfrentarle.

- 2007: Nadal d. Djokovic 7-5, 6-4, 6-2 (SF): Djokovic llegó a sus primeras semifinales de Grand Slam solo para enfrentar a un fortalecido Nadal por segunda vez. El serbio ya se había establecido en el top-10, pero ni su renovado estatus en el circuito ni su magnífico comienzo (se colocó 5-2 en el primer set) le sirvieron para, al menos, sacarle a un set al mejor jugador sobre la superficie. Nadal continuó de forma soberbia su camino hacia un nuevo título, tras una final en la que volvió a inclinar a Roger Federer, repitiendo un guion calcado al de la edición anterior.

- 2008: Nadal d. Djokovic 6-4, 6-2, 7-6(3) (SF): ¿Qué hacer cuando te enfrentas a la versión más bestial físicamente del mejor jugador de la historia en tierra? Jugar tu mejor tenis y rezar. En ocasiones ni eso es suficiente, y así lo comprobó Novak en la edición de 2008. El serbio planeaba venganza con un título de Grand Slam bajo el brazo, pero la historia se repitió: Nadal era sencillamente superior. En aquel 2008 en el que arrasaría sin piedad de camino al título, aún más.

- 2012: Nadal d. Djokovic 6-4, 6-3, 2-6, 7-5 (Final): Una de las finales más bonitas de la última década y uno de los duelos más controvertidos entre ambos. Novak Djokovic apuntaba claramente a un objetivo inigualable: ganar los 4 Grand Slam de forma consecutiva. Su último escollo era el más difícil todavía, el peor escenario posible para hacerlo. Entró frío al partido, ante un Nadal absolutamente dominador que, sin embargo, parecía ir ablandándose conforme el cielo de París se nublaba.

Con condiciones más pesadas, el revés de Novak empezó a causar estragos y el serbio mostró su versión más dominante, la que le había hecho convertirse en el rey del circuito. En su mejor momento, sin embargo, las gotas de lluvia aparecieron y obligaron a posponer la final al lunes, bajo un sol radiante que provocó un cambio de dinámicas total en el partido. Djokovic entregó la final de la peor forma posible, con una doble falta. Nadal se revolcó por el suelo en señal de victoria: el único rey sobre París seguía siendo él.

- 2013: Nadal d. Djokovic 6-4, 3-6, 6-1, 6-7(3), 9-7 (SF): Qué decir de un duelo que a día de hoy permanece en la retina de muchos. Quizás la gran mayoría recuerde, sobre todo, ese fallo de Djokovic al tocar la red que le impidió consolidar una ventaja importantísima en el quinto set. Si ese error de principiante no se hubiese dado, quizás hoy el serbio tendría un Grand Slam más en su buchaca. Pero aquella batalla que se alargó por 5 horas fue una demostración de coraje y fuerza por parte de ambos.

Nadal acabó con la deslumbrante cifra de 65 winners, firmando su primer duelo histórico en una temporada en la que volvería a dominar el circuito tras una lesión importante. "Es un gran campeón y ganará aquí algún día, de eso estoy seguro", afirmó Nadal tras un duelo heroico. "Fue un gran partido, sin dudas, pero lo único que puedo sentir ahora mismo es profunda decepción", firmó el serbio. Tendría que esperar tres años hasta levantar la Copa de los Mosqueteros.

- 2014: Nadal d. Djokovic 3-6, 7-5, 6-2, 6-4 (Final): El reinado de Nadal sobre la tierra batida parecía en entredicho. Novak le había ganado la partida en Roma, llegaba como un cohete a la final y parecía con ganas de cobrarse la revancha del año anterior. Así, el serbio se puso set arriba tras firmar un parcial muy dominante. Estaba a solo dos mangas de hacer historia.

Es ahí cuando la figura de Rafa Nadal volvió a emerger, haciendo pequeño a un Djokovic que adoptó un esquema de juego más pasivo, como si aún no terminase de creer que podía tumbar al manacorí. Nadal se dejó la piel y el físico, literalmente, para conseguir una victoria que le dejó al límite, con dificultades para andar tras el encuentro. No fue el duelo más brillante por parte de ambos, pero sí otra muestra de la brutal exigencia física que depara cada partido entre ambos.

- 2015: Djokovic d. Nadal 7-5, 6-3, 6-1 (QF): Resulta irónico que el último enfrentamiento entre ambos sobre la tierra parisina lleve la firma del serbio. Pero sí, aquel 2015 se juntaron todos los condicionantes posibles: fue una de las peores temporadas de Nadal y para muchos la mejor de Djokovic. La pócima para derrotar al manacorí sobre tierra estaba más que cocinada, pero el único capaz de ponerla en acción sobre Roland Garros había sido Robin Soderling,,, hasta que Novak hizo lo -casi- imposible en cuartos de final.

Sobre la pista no hubo color, y especialmente importante fue la diferencia en la actitud: Novak estaba impasible, impenetrable, concentrado y sin dejar una mínima duda, mientras que Nadal no parecía el mismo: apesadumbrado, cabizbajo y tirando la toalla en el tercer set. Eso sí, Nole tendría que esperar un año más para conquistar Roland Garros, y es que el peaje mental y físico que uno experimenta tras jugar ante Nadal sigue estando ahí independientemente de la versión del manacorí.

Estamos en 2020, y mañana tendremos el octavo duelo entre ambos en Roland Garros. Se nos avecina un clásico más del deporte que amamos: solo queda saborearlo y disfrutarlo como si de un plato gourmet se tratase.