
Después de recibir la sanción de once meses tras dar positivo por dopaje a mediados de enero, Nicolás Jarry dejó atrás la primera etapa de esta pesadilla que está viviendo. Ahora, después de demostrar su inocencia, falta la segunda parte, la de cumplir la condena. Aprovechando la cuarentena mundial y el cierre del circuito ATP, Séptimo Game se metió virtualmente en la habitación del chileno para repasar todo lo vivido en este último año, desde su título en Bastad en el verano pasado, pasando luego por su racha de derrotas y, por último, la polémica sanción. Estos fueron los puntos más interesantes que se trataron en la charla.
Primer título en Bastad 2019. “No se disfrutó tanto porque luego teníamos Hamburgo donde defendía mucho y me tocaba contra Zverev. Por suerte, una vez terminado todo aquello sí que pude disfrutarlo al máximo con toda mi familia y mis amigos. Es el último recuerdo bonito que guardo de mi carrera, una semana muy buena donde me sentí de maravilla desde el minuto uno. El club es fantástico, la cancha central está en mitad del hotel, uno va a entrenar con las chanclas puestas, te hace sentir muy relajado”.
Doce derrotas seguidas tras aquel triunfo. “Es raro que la gente todavía no se de cuenta que solo los mejores del mundo ganan todas las semanas, pero los medios solo se fijan en esto. Los mortales no funcionamos así. En mi caso, quizá tampoco fue normal pasar de campeón a perder en tantas primeras rondas. Me relajé un poco después de aquel triunfo, me saqué un peso enorme de encima, llevaba mucho tiempo trabajando para lograr ese título. Ahora estoy trabajando duro para convertirme en un jugador mucho más constante”.
Fortaleza mental para salir de ese túnel. “Solo la gente que sigue el tenis y me sigue a mí desde chico puede entenderlo. De juniors también tuve una racha mala de seis derrotas seguidas, ahí es donde te paras a pensar si realmente eres bueno, ¿cómo vas a ser bueno si pierdes seis partidos seguidos? Ha sido algo normal en mi carrera. Una vez, hablando con Pablo Andújar en Viña del Mar, me contó que él llegó a sumar nueve primeras rondas seguidas. Él, que era un jugador ATP. Se me quitaron las ganas de llorar, solo quería volver a trabajar para recuperarme. Al final ese poquito de suerte que te falta puede aparecer en cualquier momento para acabar con la racha”.
Fusión ATP/WTA. “Se lleva hablando sobre ese tema desde principio de año. Creo que puede ser algo nuevo y que puede ser bueno. No hay ningún otro deporte que esté junto, que sea mixto, así que seguro que puede llegar a ser bueno para los mujeres, sobre todo por todo lo que se vive en el día a día del tenis con ese tema. Veremos cómo se gestiona el tema económico, ver si es posible esa fusión y si esto le ayuda más a la ATP o a la WTA. De todas formas, será difícil porque todavía hay cosas que cambiar dentro de la propia ATP, primero habría que ver eso. El tenis es un deporte donde solo los 80 primeros del ranking ganan buenas cantidades de dinero, el resto se tienen que ir buscando la vida cada temporada”.
Situación incómoda al enterarse de su positivo en dopaje. “La notificación fue toda a través de un portal, como un Gmail específico donde la ATP te manda los mensajes relacionados con eso. A partir de ahí tuve que buscarme un abogado para dialogar con ellos y con la ITF. Son momentos donde vives mucha incertidumbre, hay mucha demora en las respuestas, te tratan todo el rato como si lo hubieras hecho a propósito, como si fueras culpable, te tratan como si fueras la peor persona del mundo. Se supone que la ITF debe ser un compañero, son ellos para quien trabajas, así que se hace muy difícil aceptar esos gestos. Uno se sabe las normas generales, pero nunca vas a pensar que una pastilla va a estar contaminada y va a generar todo esto”.