"Quiero que el tenis sea un lugar mejor". Es una frase tan ambiciosa como recelosa de caer en el cajón de los tópicos o frases 'corporativas', pero si lo dice Noah Rubin, la cosa cambia mucho. El norteamericano, quien sigue actualmente batallando en los Challenger para alcanzar su mejor nivel, es creador, entrevistador y guardián de un tesoro, un proyecto llamado 'Behind the racquet', donde ha conseguido que los jugadores no sólo cuenten experiencias personales y emocionales sino que además sean partícipes de entregas posteriores a las suyas. Tras cada historia, que se publican en la web y en la cuenta de Instagram del proyecto, es muy común ver a muchos jugadores y jugadoras que apoyan al tenista que de algún modo se abre emocionalmente para contar en primera persona su línea de vida, personal y profesional.
Está siendo este momento uno de mucha producción en el canal. Rubin dice haber realizado hasta 35 entrevistas en este confinamiento mundial, habiendo publicado recientemente las historias de Pablo Andújar o Roberto Bautista. Pero también queda por contar la suya. La de Noah Rubin, que ha atendido a 'Tour-Talk', cuenta muchas cosas del proyecto y de lo que ha buscado con él, señalando dos entrevistas concretas como las más impactantes.
"Es increíble ver en el último año lo lejos que ha llegado", comenta Rubin sobre el proyecto. “Durante la pandemia, solo, estando en casa, creo que he publicado 35 entrevistas nuevas. Es un momento increíble para mí, obviamente agotador, y también hacer entrevistas sobre mí como esta. He estado muy ocupado. No se trata tanto de la historia sino de la conversación: haber hecho que los hombres adultos lloren delante de mí, escuchar historias sobre personas que se abren cuando les das una plataforma. Quería resaltar la salud mental y abrir una conversación al respecto".
"Sandgren fue la entrevista más impactante: me abrazó y lloró"
Rubin reflexiona previamente sobre el momento actual, de lo que significa para el tenis. "Siempre nos quejamos de la duración de las temporadas (rara vez tenemos la capacidad de tomar un descanso), pero muchos de mis compañeros jugadores profesionales realmente no saben cómo vivir sin tenis. No hemos tenido la oportunidad de tomarnos un descanso sin sentir la ansiedad de que nos estamos perdiendo. Es importante que estos jugadores se tomen un tiempo y digan: "Oye, llevemos el cuerpo a un punto en el que no tengamos molestias. Está bien mantenerse activo y mantener la movilidad. Sin embargo, no hay necesidad de entrenar a un alto nivel en este momento. Este es un momento para tomarse un tiempo libre el uno para el otro."
"Creo que soy diferente porque esta vez casi ha estado más ocupado que mi horario normal de tenis. Estoy haciendo todo este trabajo de 'Behind The Racquet' (seis o siete entrevistas al día). Realmente no tengo tiempo para descansar con todo lo que estoy haciendo. Sumo cinco o seis horas de trabajo. Y tengo muchas ganas de pasar algún tiempo con familiares y amigos, pero creo que es hora de relajarse y hacer algo que siempre hemos querido hacer; disfruto alejándome del mundo del tenis".
Rubin cuenta finalmente qué dos entrevistas le han parecido las más impactantes e interesantes de todas. “Una, Tennys Sandgren, quien fue el primero en abrazarme realmente y llorar frente a mí en una conversación de una hora. Él me dijo: ‘Muchas gracias. Nunca he podido compartir mi historia completa. Gracias por darme esta oportunidad". Otro, Darian King, de quien soy muy buen amigo, el habló sobre la muerte de su madre. No tenía ni idea. Entonces, eso provocó algo en mí que decía: "Guau". Tengo la responsabilidad de abrirme. Tiene que haber tantos otros en la misma situación y tengo que ser capaz de arrojar luz si la gente quiere. Al final todos posan detrás de su raqueta de tenis. Todos están al mismo nivel. Hay jugadores prometedores y también está Daniil Medvedev, que es el número 4 del mundo. Todos están haciendo lo mismo: ser quienes son. Hay algo entre usted y ellos que no siempre conoce y hay una barrera que superar. Esa es la metáfora con la que jugaba y la raqueta representa una imagen genial. Obviamente, tengo la suerte de estar construyendo algo en este momento que será mi legado y, con suerte, crecerá y crecerá y crecerá. Hacerlo durante mis días de juego es una ventaja. Quiero hacer del tenis un mundo mejor".