
La historia del tenis no solo se escribe en los torneos de Grand Slam, de eso podemos dar buena cuenta todos los que hemos disfrutado del ATP 500 Queen´s 2019 y los numerosos sucesos inolvidables que han acaecido. El doblete de Feliciano López ha llevado al torneo a un estatus superior en el que una leyenda como Andy Murray se siente cómodo, pudiendo poner la guinda soñada por todos los aficionados. Hace cinco meses, el mundo del tenis lloraba la presumible retirada definitiva de uno de los mejores jugadores de los últimos lustros, y eso es mucho que decir. Porque ser capaz de desafiar constantemente al Big3, derrotarles y alcanzar hitos como ser número 1, ganar tres majors y adjudicarse dos oros olímpicos individuales es algo impresionante en cualquier circunstancia, pero coexistiendo con los mejores de la historia alcanza un sesgo de mito.
CAN YOU BELIEVE IT!?! --
— ATP Tour (@ATP_Tour) 23 de junio de 2019
The moment @andy_murray & @feliciano_lopez secured the doubles title at @QueensTennis...
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El de Dunblane reapareció y ganó, pero la grandeza de lo realizado esta semana radica en que el segundo verbo de esta oración ha sido lo menos importante. Andy volvió a mostrar a todos los jóvenes cuáles son los ingredientes imprescindibles para triunfar: humildad, sacrificio, trabajo duro, honestidad y mucho amor por el tenis. "Ha sido una semana increíble, he disfrutado muchísimo del tenis estos días. Al principio de la semana estaba muy tranquilo, pero los triunfos despertaron mi instinto competitivo. Llegaron los nervios y también mi mejor rendimiento", aseguró en rueda de prensa el escocés, que desveló cuáles han sido sus sensaciones en cuanto a posibles molestias físicas en su cadera u otras partes del cuerpo.
"Me encuentro genial. Esta mañana estaba algo rígido, quizá por la tensión acumulada ayer. Lo más positivo para mí es que siento que he perdido el miedo. Empecé la semana con algo de precaución en los desplazamientos, pero al ver que no sentía molestias he podido moverme con velocidad e ir a por pelotas que no pensé que podría volver a alcanzar. He podido jugar sin pensar nada en mi cadera y el hecho de haberme tirado por el suelo y hacer movimientos bruscos y no haber sentido dolor, supone una excelente noticia para mí", comentó con orgullo un hombre que siente haber despertado su fiera competitiva y ya mira con ansias lo que puede deparar el futuro.
Tanto es así, que no tuvo reparos en desgranar el dilema al que se enfrenta en cuanto a calendario. "Tengo dos opciones. La primera de ellas es competir solo en dobles durante toda la gira estadounidense y tomarme unas semanas de descanso después de Wimbledon 2019. Si escojo esto, no competiría en singles hasta el tramo final de temporada. La otra opción sería empezar a practicar de manera intensa y a competir en individuales muy poco tiempo después de Wimbledon, en torneos menores, y seguir jugando dobles. Si eligiera esto, necesitaría tener cuatro semanas de entrenamientos y podría llegar en condiciones de disputar el Masters 1000 Cincinnati 2019 y el US Open 2019", comentó un Andy que recibió el cariño de todos los presentes y, por supuesto, también de su compañero Feliciano López. "Estoy muy feliz de que este hombre accediera a jugar junto a mí. Estamos todos encantados de que vuelva a competir", dijo de un hombre que disfruta jugando dobles.
"No percibo esta modalidad como un mero entretenimiento o un consuelo si no puedo jugar individuales nunca más. Ojalá pueda volver al singles, pero si no pudiera, consideraría especializarme en dobles", desveló antes de profundizar en su estado de forma. "Estos meses he disfrutado de la vida, pude hacer cosas normales que antes no podía. He golpeado bien la bola, aunque lo mejor de todo es que considero que puedo hacerlo mejor", afirmó el jugador más cotizado para disputar dobles mixtos en Wimbledon 2019, un tema que abordó en su rueda de prensa. "Me falta hablar con gente aún. Una opción podría ser Victoria Azarenka, pero no hablé con nadie", señaló antes de ser cuestionado por las hermanas Williams. "Veo complicado que puedan comprometerse porque tienen grandes aspiraciones en individuales, pero me encantaría poder compartir pista con alguna de ellas".
Si algo ha quedado claro esta semana es que Andy Murray ha recuperado la ilusión por el tenis y la esperanza por volver a ser un jugador importante. El flamante campeón de dobles en el ATP 500 Queen´s 2019 mira al futuro con ambición y más certezas que dudas respecto a si podrá seguir empuñando una raqueta de tenis, al menos en la modalidad de dobles. Su siguiente parada será Eastbourne, antes de afrontar Wimbledon 2019, un torneo que podría suponer la catapulta definitiva para un retorno mucho más contundente y veloz de lo esperado.