Bob Bryan: "Todo ha sido un 'win-win' desde la cirugía"

El norteamericano Bob Bryan relata, al detalle, el proceso que le llevó a un reemplazo de cadera: "Desgasté hasta el último milímetro de cartílago; chocaban los huesos".

Alejandro Arroyo | 22 Feb 2019 | 16.24
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En Puntodebreak encontrarás toda la actualidad y noticias de tenis, así como fotos de tenistas e información de los torneos ATP y WTA como los Grand Slam y Copa Davis.
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Primero fue el codo la articulación que más sufrió cuando los materiales eran tan pesados como poco flexibles. Recientemente fueron las muñecas, que pasaron a realizar giros de todo tipo y cargas mayores. Ahora, son las caderas las que están sufriendo el desgaste acumulado de los años en algunos tenistas de renombre. Con el complejo caso y posterior testimonio de Andy Murray, la experiencia de Bob Bryan sirve de posible ejemplo para pensar que el escocés pueda tener una última esperanza.

No hace mucho fue el propio jugador norteamericano, en la BBC, el que mandó un mensaje positivo y esperanzador para el exnúmero 1 del mundo, que en el pasado Open de Australia admitió que ese torneo podría ser el último de su carrera profesional. Y más recientemente, concretamente en el día de ayer, la madre de Andy, Judy, recogía el caso del doblista yankee como un espejo. Y las siguientes declaraciones, compartidas por ATP, van en esa línea.

"Empecé a cojear muy visiblemente durante el entrenamiento. El miércoles jugamos nuestro partido y ganamos. Pero me tuve que tomar algunos analgésicos para el siguiente partido. Ganamos, me tomé más analgésicos al punto de que, cuando llegamos a la final, no sabía si podíamos salir a jugarla. Pero cuando ganamos el título, la emoción de la victoria te quita el dolor que tienes, así que no pensé en nada". Este relato se produce en el Masters 1000 de Montecarlo de 2018, el punto de arranque y también de inflexión de la lesión que llevó a Bob Bryan a pasar por el quirófano y tener hoy día una cadera de metal.

"Desgasté hasta el último milímetro de cartílago que tenía"

"La cojera empeoró y luego empecé a hacer abdominales. Estábamos tan confiados que seguimos ganando partidos, lo que probablemente fue lo peor. Al final, podía escuchar yo mismo lo que pasaba con mi cadera; pude escucharlo yo mismo: sólo se escuchaba hueso con hueso. Desgasté hasta el último milímetro de cartílago que tenía, así que cuando impacté con el suelo al bajar del movimiento de saque fue cuando me rompí el hueso y luego tuvimos que retirarnos". Nunca se habían retirado de un torneo, y esta fue la primera. Bob necesitó una silla de ruedas para llegar al aeropuerto.

Bob trabajó duro para recuperarse, recibiendo una inyección de células madre que era extremadamente dolorosa. A las pocas semanas, decidió someterse a una cirugía de reemplazo de su cadera derecha en Nueva York. Ningún jugador había regresado de semejante operación antes. "Honestamente, mi objetivo era jugar en el ATP Tour de nuevo. Cuando fui al quirófano, realmente pensé que estaba todo al 50-50 sobre una futura vuelta a las pistas. Era un territorio inexplorado. Fui el primero en regresar con un reemplazo de cadera. Honestamente, estoy feliz de practicar y poder terminar nuestra carrera juntos. Las expectativas son un poco más bajas, pero eso no significa que no esté trabajando duro".

En ese tiempo, su hermano hizo pareja con Sock, y ganaron varios títulos, pero Bob Bryan nunca se cuestionó si volvería a formar equipo con su hermano. En diciembre, los gemelos se reunieron en la casa de Bob en Florida para entrenar y recuperar el ritmo. “Todos los días intentábamos simular partidos. Pero al final del segundo set, comenzó a fatigar su cadera, perdiendo mucha velocidad con su servicio, y luego su movimiento empeoraría. En el fondo de nuestras mentes nos preocupábamos un poco y dudábamos si él podría volver al nivel en el que estaba jugando antes. A principios de diciembre, cuando comenzamos los entrenamientos, ni siquiera estábamos cerca de estar en ese nivel. Incluso en el vuelo a Australia, tenía mucha ansiedad de si podríamos ser competitivos".

Bob sabe que su caso, por cercanía en el tiempo y similitud en la lesión, es de gran inspiración para el escocés, que sin el caso de Bob le sería mucho más complicado encontrar motivos y referencias para recuperar la fe. "Quería una alta calidad de vida, al igual que Andy Murray. En este momento no tengo dolor, puedo dormir bien, puedo correr con mis hijos en el parque, puedo andar en bicicleta, así que todo ha sido un win-win desde la cirugía".